La muerte es irse a los promontorios desconocidos. Por eso no me gusta ver promontorios antes de morir.
Ramón Gómez de la Serna
¿Acaso la verdad sólo lo es cuando nos muestra aquello que esperábamos ver?
Dolores Redondo
No digáis que, agotado su tesoro, de asuntos falta, enmudeció la lira: podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía.
Gustavo Adolfo Bécquer
Las balas cambian más los gobiernos que los votos.
Ian Holm
Tómatelo con calma.
Jeff Bridges
Si no se tiene cierta condescendencia y cierto respeto por el autor, la mitad de un libro serio impacienta siempre cuando es nuevo y dice cosas nuevas; no oímos nada de lo que nunca hubiéramos pensado.
Joseph Joubert
Porque, si quieres tener algo en todo,
Juan de la Cruz
Renunciar a la felicidad es como arrojar piedras preciosas al océano. Es mucho peor que cualquier pecado.
Ken Follett
Vivir sola es como estar en una fiesta donde nadie te hace caso.
Marilyn Monroe
No es la blancura de los cabellos la que comunica prudencia.
Menandro
El hacer el padre por su hijo es hacer por sí mismo.
Miguel de Cervantes
Quien pierde su fe no puede perder más.
Publilio Siro
El amor es tan fuerte como la muerte, la insistencia en la devoción exclusiva es tan inexorable como el Seol.
Salomón
Necesitas la versión más simple de la idea para que crezca naturalmente en la mente de tu sujeto. Es un arte muy sutil.
Tom Hardy
He descubierto que las personas no son más que una capa tras otra de secretos. Crees que las conoces, que las entiendes, pero sus motivos siempre permanecen ocultos, enterrados en sus corazones. Nunca conocerás a nadie, aunque, a veces, puedes decidir confiar en alguien.
Veronica Roth
No fue Dios quien me salvó. Fue la medicina. La razón es mi profeta y me dice que igual que un reloj se para, nosotros nos morimos. Se acabó. Y si el reloj no funciona bien, nosotros mismos tenemos que arreglarlo aquí y ahora.
Yann Martel