Dulce y ardiente, cálido como tu pensamiento, cubriendo con su sombra tu flanco juvenil e inclinado como tus cejas.
Rainer Maria Rilke
Tus ojos son ojos vivos que en quien los mira se clavan, y descienden silenciosos hasta la hondura del alma.
Aurelio Espinosa Pólit
Menos mal te hará un hombre que te persiga, que una mujer que te siga.
Baltasar Gracián
Usted será el Sarmiento del Siglo XXI.
Domingo Cavallo
¡Váyase señor González, váyase!
José MarÃa Aznar
Nadie pudo ver el cielo sin elevar la mirada.
José Narosky
Porque en momentos de angustia olvidamos estos sagrados ideales, porque hicimos de nuestras comodidades materiales, concentración de nuestros sentidos y aspiración única de nuestros espÃritus, nos hemos visto vejados, ultrajados y deshonrados en nuestras afecciones más caras, sin que a duras penas asomase el sonrojo en nuestras mejillas y palpitaran de vergüenza nuestros corazones.
Leandro Alem
Antes habÃa un lenguaje atribuido a la mujer, el de la suavidad y el de la queja pudorosa.
Mercedes Valdivieso
Que la ingratitud de los que reciben vuestros favores no os fuerce a arrepentiros de haberlos hecho, sino que sirva para enseñaros a obrar el bien con un alma pura y desprovista de toda esperanza en los hombres.
Niccolò Tommaseo
El arte no es casto, deberÃa prohibÃrselo a los ignorantes inocentes, no poner jamás en contacto con él a quienes no están suficientemente preparados. SÃ, el arte es peligroso. Si es casto, no es arte.
Pablo Picasso
Nuestras vidas no son más que la suma de múltiples contingencias, y no importa cuán diversas puedan ser en sus detalles, todas comparten una aleatoriedad esencial en su diseño: esto es eso, y debido a eso, esto.
Paul Auster
Aunque la analogÃa es a menudo engañosa, es lo menos engañosa que tenemos.
Samuel Butler
No puede haber ninguna duda que desconfiar de las palabras es menos nocivo que la confianza injustificada en ellas. Además, desconfiar de las palabras, y acusarlas de los horrores que podrÃan hibernar discretamente dentro de ellas - ¿no es esto, después de todo, la verdadera vocación del intelectual?
Václav Havel
Es el hombre que más práctica la religión y menos piensa en ella. Ni duda ni cree. Acepta lo establecido, viviendo en un sonambulismo intelectual.
Vicente Blasco Ibáñez
Una vida activa sirve a la intencionalidad de dar al hombre una oportunidad para comprender sus méritos en la labor creativa, mientras que una vida pasiva de simple goce le ofrece la oportunidad de obtener la plenitud experimentando la belleza, el arte o la naturaleza.
Viktor Frankl
Me dio el corazón que agita su marco cuando miro el fruto del cerebro humano, cuando miro el bueno tan lejos del malo, cuando miro el fondo de tus ojos claros.
Violeta Parra