El optimismo ha ocasionado grandes catástrofes.
Rafael Pérez Gay
La integridad no tiene necesidad de reglas.
Albert Camus
Que se diría de unos hombres que viendo asaltar su casa por los ladrones, se pusiera a disputar con sutilezas los derechos que cada uno tenía para vivir en esta sala o en la otra.
Antonio Nariño
Tu vida es un traje a tu medida.
Doménico Cieri Estrada
Un libro no tiene edad.
George Steiner
Se ha debatido mucho si un poema es el resultado de la naturaleza o del arte. Por mi parte no veo qué podría hacer el arte sin la ayuda de la naturaleza, ni ésta sin el arte. Ambas necesitan ayudarse mutuamente y deben estar siempre estrechamente unidas.
Horacio
A mí tan sólo penas y amargura, me quedan en el valle de la vida; como un sueño pasó mi infancia pura, se agosta ya mi juventud florida.
José de Espronceda
Desde la infancia nos enseñan; primero a creer los que nos dicen las autoridades, los curas, los padres... Y luego a razonar sobre lo que hemos creido. La libertad de pensamiento es al revés, lo primero es razonar y luego creeremos lo que nos ha parecido bien de lo que razonamos.
José Luis Sampedro
Una vez que se mata a una vaca, lo que tienes que hacer es preparar una hamburguesa.
Lady Gaga
Aquel que para amigos y adversarios guarda igual corazón; aquel que permanece igual ante la gloria como ante la vergüenza, a ése bien lo amo.
Mahabharata
Es un entreverado loco, lleno de lúcidos intervalos.
Miguel de Cervantes
Un vino del país. Qué le vamos hacer: No sea conocido. Quizá no sea famoso. Pero es el mío, el de mi país.
Pierre Sansot
Mire por la ventana, ya conoce el juego: desorden, guerra,... Basta con dar un paso.
Robert Redford
El hombre sabio es pobre en apariencia, pues su tesoro está en Suiza.
Roberto Fontanarrosa
La forma y el material están tan íntimamente ligados, que la forma se debe modificar si se modifica el material.
Rogelio Salmona
La revolución proletaria debería arrojar un rayo de bondad para iluminar la triste vida de las prisiones, disminuir las sentencias draconianas, abolir los bárbaros castigos -las cadenas y azotes- mejorar en lo posible la atención médica, la alimentación y las condiciones de trabajo. ¡Es una cuestión de honor!
Rosa Luxemburgo