A grandes males, grandes remedios.
Proverbio
Hacer mal por voluntad es peor que hacerlo por la fuerza.
Aristóteles
Israel tendrá seis días y descansará el séptimo.
Benjamín Solari Parravicini
Color deseo y descubro color me siento y me desnudo color. Color sueño y color despierto.
Carmen Naranjo
La función primaria de la comunicación escrita es facilitar el sometimiento.
Claude Lévi-Strauss
El hombre, sublime por sus aspiraciones y despreciable por sus instintos, es tal, que ni confiar ni desconfiar de él se debe nunca absolutamente.
Concepción Arenal
Doy gracias por haber sobrevivido. Por haber conocido la desgracia. Por haber dejado de ser el que fui. No quiero olvidar el común destino de los hombres ni reclamar para mí una suerte especial. Quiero encontrar el camino de la justicia y librarme de lo superfluo y no conservar sino lo que merezca ser conservado.
Czeslaw Milosz
Los buenos modales están olvidados en América. Yo creo que es de mala educación andar por ahí con vaqueros rotos y sin peinar, con un Starbucks en la mano.
Dita Von Teese
No hay que olvidar el maravilloso poder del teatro, su efecto inmediato sobre el espectador. No existe instrumento mejor de propaganda.
Émile Zola
La vanidad es a la sociedad lo que el viento al molino de aspas: aunque no sea muy fuerte, sin embargo es viento bueno para poner en movimiento la máquina.
Friedrich Maximilian Klinger
Nena llevame a un lugar con parlantes. Ya cerraron la ciudad, ¿A donde vamos?
Gustavo Cerati
Tardo cinco a diez minutos en arreglar mi cabello, bueno tal vez ocho.
Justin Bieber
Ya es hora de reunir todos los documentos, de editar todos los materiales y de proceder a su estudio.
León Trotski
Cada segundo que vivimos es un momento nuevo y único del universo, un momento que jamás volverá.
Pablo Casals
En los cuentos infantiles, las princesas besan a los sapos, que se transforman en príncipes. En la vida real, las princesas besan a los príncipes, que se transforman en sapos.
Paulo Coelho
La maternidad no se trata sólo de llevar nueve meses y de dar a luz seres sanos de cuerpo, sino de darlos a luz espiritualmente. Es decir, no sólo de vivir junto a ellos, con ellos, sino ante ellos. Creo más que todo en la fuerza del ejemplo.
Victoria Ocampo