Quien bien quiere a Beltrán, bien quiere a su can.
Proverbio
Si bastara con amar, las cosas serían demasiado sencillas. Cuanto más se ama, más se consolida lo absurdo.
Albert Camus
Las democracias observan más cuidadosamente las manos que las mentes de quiénes las gobiernan.
Alphonse de Lamartine
En verdad, si se considera por una parte el arte, la riqueza, el inmenso número de los medios puestos en acción, y por otra parte el fruto insignificante del resultado, es preciso convenir que la vida es un mal negocio, un negocio en el que los beneficios ni siquiera cubren los gastos.
Arthur Schopenhauer
¡Ea! miserables que tan grandes os creéis, que juzgáis a la humanidad tan pequeña, que todo lo queréis reformar. Reformáos vosotros mismos; con esa tarea os basta.
Frédéric Bastiat
Debemos arrojar a los océanos del tiempo una botella de náufragos siderales, para que el universo sepa de nosotros lo que no han de contar las cucarachas que nos sobrevivirán: que aquí existió un mundo donde prevaleció el sufrimiento y la injusticia, pero donde conocimos el amor y donde fuimos capaces de imaginar la felicidad.
Gabriel García Márquez
La diferencia entre un civil y un militar es que el primero siempre puede militarizarse, pero el segundo rara vez puede civilizarse.
Georges Clemenceau
La geografía es la ciencia que nos permite saber exactamente cuántos kilómetros de patria debemos amar. Ni uno más ni uno menos.
Jaume Perich
No hay más que una manera de ser feliz: vivir para los demás.
León Tolstói
Quien huye de las obligaciones sociales es un desertor.
Marco Aurelio
No amar es como herir a Dios en la pupila de Su ojo. ¿Hay algo más delicado que la pupila?
Pío de Pietrelcina
Puedes tener lo que quieras en esta vida si ayudas a suficientes personas a tener lo que ellas quieran.
Raimon Samsó
El camino más corto para llegar a la riqueza es despreciarla.
Séneca
No sabes cómo temblarían los poderosos si lleváramos la violencia a la puerta de su casa. Si vieran amenazados sus privilegios y sus vidas, negociarían para no perderlo todo.
Ulrike Meinhof
Un hombre ciego, aunque lleve en la mano una luz, no logrará ver.
Vardhama
Depositadla en la tierra; y que de su carne virgen e impoluta broten violetas.
William Shakespeare