La moda es la pugna entre el instinto natural de vestirse y el instinto natural de desnudarse.
Pitigrilli
Cuando la riqueza aumente y se concentre en pocas manos, cuando el lujo se imponga en la sociedad, la virtud será considerada en mayor grado un simple y elegante apéndice de la riqueza, y la tendencia será alejarse de los valores republicanos.
Alexander Hamilton
Salgo del portal, quiero morir; tú en la habitación, llorando por mí; tú me has hecho tan feliz, que siempre estaré a tu lado, cuidando de ti.
Amaia Montero
Entre su alma y la de un niño no había más diferencias que algunas cicatrices.
André Maurois
¿Por qué la costumbre no es natural? Mucho me temo que la naturaleza no es más que una primera costumbre, como la costumbre es una segunda naturaleza.
Blaise Pascal
No se queda uno porque quiera a alguien: dejamos de irnos si no detestamos a nadie, y nos vamos cuando odiamos. Sólo lo desagradable nos mueve a obrar. Somos cobardes.
Boris Vian
Estamos mal, pero vamos bien.
Carlos Menem
¿Sabes qué causa también la pérdida de memoria a corto plazo? Una enfermedad venérea. ¡Quizá tu maldita y putaesposa chupó demasiadas vergas infectadas y te convirtió en un retrasado!
Carrie-Anne Moss
Este pez podría alimentar a mucha gente, pero ¿Serían dignos de comérselo? No claro que no.
Ernest Hemingway
Ésta es mi patria, Samuel, yo nací aquí y no siento que sea más mía que de nadie.
Julia Navarro
Los madrileños se acercan al circo a ver un animal tan bueno como hostigado, que lidia con dos docenas de fieras disfrazadas de hombres.
Mariano José de Larra
Vamos a entregar la economía 'tiqui taca' y no 'naca la pirinaca'como dijo el ingeniero Longueira.
Nicolás Eyzaguirre
El caballero es el hombre que, valiéndose de la fuerza, trabaja por la paz.
Ramon Llull
Quiero una casa edificar como el sentido de mi vida, quiero en piedra mi alma dejar erigida.
Ramón María del Valle-Inclán
Si tuvieras que arar un campo, ¿qué preferirías usar, dos fuertes bueyes o 1024 pollos?
Seymour Cray
El amor propio es el más grande de todos los aduladores.
Walter Scott