Ayuda a tus semejantes a levantar su carga, pero no te consideres obligado a llevársela.
Pitágoras
El reino de la poesía es el reino de la verdad.
Adelbert von Chamisso
Viniste al fin, y por eso dejé ir a las libélulas que conservaba cautivas entre mis cinco dedos este atardecer de otoño.
Akiko Yosano
Somos oradores sin fieles, ideólogos sin discípulos, predicador en el desierto. No hay nada detrás de nosotros; nada debajo de nosotros, que nos sostenga.
Andrés Rivera
Toda gran causa comienza como un movimiento, se convierte en un negocio y termina siendo un fraude.
Christopher McDougall
No tengo fe en la perfección humana. El hombre es ahora más activo, no más feliz, ni más inteligente, de lo que lo fuera hace 6000 años.
Edgar Allan Poe
A juicio de los gatos, las personas no somos más que muebles de sangre caliente.
Jacquelyn Mitchard
Dejemos que la naturaleza actúe a su aire; ella conoce su oficio mejor que nosotros.
Michel de Montaigne
Una cabeza sin memoria es como una fortaleza sin guarnición.
Napoleón Bonaparte
La conciencia tiene horror al vacío.
Paul Valéry
Es verdaderamente importante para el actor o cualquier persona creativa, permitir expresarse, sentirse cómodos, con la libertad de saber que van a aprovechar tus ideas. Hay que tratar mucha gente y respetar lo que hacen. Nada vale más que el hecho de que te acepten una idea tuya y se lleve a cabo. Te da muchísima confianza.
Robert De Niro
Quince hombres sobre el cofre del muerto yo-ho-ho y una botella de ron.
Robert Louis Stevenson
Tú sabes que estás creando tu propio mundo y que tienes un poder infinito para crearlo tal como lo desees.
Shakti Gawain
Explicar el significado de las letras le quita al asunto todo el encanto, incluso decepcionaría a los fans. Prefiero dejarlo estar, de modo que cada uno pueda aportar su propia interpretación y su propio sentimiento.
Till Lindemann
En cuanto el hombre abandona la envidia empieza a prepararse para entrar en el camino de la dicha.
Wallace Stevens
Fue, como si la ciudad, en su convulsión y su desgracia, hubiera generado espontánea y necesariamente ese minúsculo universo del alma, unas pocas ventanas intactas cegadas con pintura negra. Nadie quería ver la ciudad destrozada.
William Gibson