Toda nuestra producción es una contrasentido. Al negocio no le interesan las necesidades de la sociedad, solo trata de aumentar las ganancias del negociante. Por eso, la industria fluctúa constantemente y está en una crisis crónica.
Piotr Kropotkin
Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente borrada por la lluvia.
Alejandra Pizarnik
De repente, volvió a abrir los ojos. Algo hizo que la bicicleta se detuviese en seco y lo último que recordaba era la tierra que se le venía encima a toda velocidad.
Camilla Läckberg
Alguna vez me quejé de yates en el Mediterráneo con Madonna, que la idolatraba como a una niña, y me abofeteó en la cara.
Elizabeth Banks
Es un sueño hecho realidad.
Fernando Alonso
El pesimista es un optimista con experiencia.
François Truffaut
Yo sufrí dos accidentes graves en mi vida, uno en el que un autobus me tumbó al suelo... el otro accidente, ¡es Diego!
Frida Kahlo
No ha habido ninguna generación anterior de hombres de Estado que haya tenido que dirigir los asuntos públicos en un ambiente tan desconocido y al borde del Armagedón.
Henry Kissinger
Rajoy se ha convertido en la vuvuzela de la crisis.
José Blanco López
Nosotros no vamos a defender una industria que nunca ha defendido a los músicos.
Kutxi Romero
Desde hace mucho lucho contra la decoración. Sólo hice eso de joven y por eso no me gusta. La decoración es algo superficial, ocupa un lugar inmutable. Por eso los edificios públicos se decoran para publicitar a las personalidades. No hace falta mirarla siempre, pero en la vivienda es algo obsesivo.
Le Corbusier
No se de que se trata, pero me opongo.
Miguel de Unamuno
¡Cómo disfrutamos nosotros el otoño aquí en Acapulco en la Cd. de México!
Miguel Luis
Mientras vamos en pos de lo incierto, perdemos lo seguro.
Plauto
La diferencia entre un hombre común y corriente y un guerrero es que el guerrero lo acepta todo como un desafío, mientras que el hombre corriente lo toma todo como una bendición o una maldición.
Warren Bennis
Hay más cosas en el cielo y en la tierra, que todas las que pueda soñar tu filosofía.
William Shakespeare