La libertad no es hija del orden sino su madre.
Pierre Joseph Proudhon
Y yo sola con mis voces, y tú tanto estás del otro lado que te confundo conmigo.
Alejandra Pizarnik
Las extinciones en curso en todo el mundo prometen ser por lo menos tan grandes como la extinción masiva que se produjo al final de la era de los dinosaurios.
Edward Osborne Wilson
El único país que puede estar seguro que nunca va a tener golpes de estado es Estados Unidos, porque no tiene embajada estadounidense.
Evo Morales
Lo que cuesta mirar, y sin embargo no me perdonaría ignorar tus ademanes.
Francisco Morales Santos
El ser humano no es ya un artista, se ha convertido en una obra de arte.
Friedrich Nietzsche
- Por favor, tengo mujer e hijos. - Bueno, sea tierno con ellos. En especial con su esposa, mi marido no fue tierno conmigo y ya ve cómo terminé.
Geena Davis
Así el Siglo XX -así zumbó la Limitada- rugió cerca y dejó tres hombres aún hambrientos en las vías, mirando con afán las luces de cola secarse y converger, huyendo, barrenadas y diestras, fuera de la vista.
Hart Crane
Es la hora de los hornos y no se ha de ver más que la luz.
José Martí
Cuán feliz era yo cuando era una infeliz.
Madame de Sévigné
Al comienzo de su conferencia y, mediante una serie de sutiles graduaciones imperceptibles al auditorio, mantenerlo vivo en tanto el tema lo exija.
Michael Faraday
Soy musulmán, soy boxeador, un hombre que busca la verdad. No estaría representando al Islam si fuese un terrorista. Todo el mundo debe conocer la verdad: Islam es paz.
Muhammad Ali
A ti, oscuridad de la que vengo, te amo más que a la llama que limita el mundo y brilla sólo para algún círculo.
Rainer Maria Rilke
Tuve miedo como no lo he tenido jamás, pero no quise que mi madre y mis hermanas me creyesen cobarde, y permanecí inmóvil en medio del presbiterio, con los ojos fijos en la puerta entreabierta. La luz de la lámpara oscilaba. En lo alto mecíase la cortina de un ventanal, y las nubes pasaban sobre la luna, y las estrellas se encendían y se apagaban como nuestras vidas.
Ramón María del Valle-Inclán
Nos prometieron el cielo y nos quedamos en el purgatorio.
Teófila Martínez
No debe leerse nunca a un mal escritor, ni aun para desdeñarlo. Siempre hay un grumo de tontería que se pega.
Wenceslao Fernández Flórez