Cuando uno se siente atraído por la libertad y la pasión, debe manifestarla para trascender.
Pérez Celis
Parece ser que el inventor de la cornamusa se inspiró ante la visión de un hombre que llevaba bajo el brazo un cerdo furibundo y asmático. Desgraciadamente el sonido creado por el hombre nunca ha obtenido la pureza del sonido obtenido por el animal.
Alfred Hitchcock
La gloria humana no es otra cosa que un gran rumor de viento en los oídos.
Boecio
El tedio puede escuchar todas las voces tentadoras, tiene camino para todos los extravíos, y no hay aberración que en un momento dado no pueda servirle de espectáculo.
Concepción Arenal
Hemos descubierto el secreto de la vida.
Francis Crick
Somos revolucionarios en el exacto significado: liberación nacional y revolución social.
John William Cooke
La única fuerza y la única verdad que hay en esta vida es el amor. El patriotismo no es más que amor, la amistad no es más que amor.
José Martí
A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política. Son un peligro.
José Mujica
Ninguna provocación puede justificar la brutal matanza de hombres impotentes y a merced de la multitud, cuando la India proclama que es no violenta y quiere ascender al trono de la libertad mediante la no violencia.
Mahatma Gandhi
Los gobiernos ilustrados, conociendo las ventajas que prometen el premio y el honor, han echado mano de estos principios motores del corazón humano para todas las empresas.
Manuel Belgrano
No hay nada como el amor de una mujer casada. Es una cosa de la que ningún marido tiene la menor idea.
Oscar Wilde
El amor no teme nada, excepto la ira.
Philip Sidney
Ni bebas agua que no veas, ni firmes cartas que no leas.
Proverbio
No es preciso estar loco para caer en el antro. Basta sobrar.
Rafael Barrett
Como persona interdependiente, tengo la oportunidad de compartirme profunda y significativamente con otros, y logro acceso a los amplios recursos y potenciales de otros seres humanos.
Stephen Covey
Dejemos con toda tranquilidad a la gente sabia el orgullo de no caer nunca en contradicción.
Søren Kierkegaard