En comunidades siempre el traidor es el vencido y el leal es el que vence.
Pedro Calderón de la Barca
¿Qué sentido tiene la literatura en un mundo sin sentido? No hay más que dos respuesta. La primera: ningún sentido. La segunda es precisamente la que hoy no parece estar de moda: el sentido de la literatura es imaginarle un sentido al mundo y, por lo tanto, al escritor que la escribe.
Abelardo Castillo
Facebook nos ha llevado hacia atrás a cuando éramos chicos, época en la que pedíamos: ¿quieres ser mi amigo?
Andrea Mucciolo
Los vuelos naturales del espíritu humano no van de placer a placer sino de una esperanza a otra.
Ben Jonson
Llegará un tiempo en que los hombres serán capaces de ampliar su mirada... y podrán ver los planetas como su propia Tierra.
Christopher Wren
La primera misión del filósofo es despojarse de todo engreímiento. Pues es imposible que un hombre aprenda lo que cree que ya sabe.
Epicteto
A mí, cuando veo un muerto, la muerte me parece una partida. El cadáver me da la impresión de un traje abandonado. Alguien se fue y no necesitó llevar aquel traje único que había vestido.
Fernando Pessoa
Nietzsche no quiere discípulos.
Friedrich Nietzsche
Estoy soltero y voy a pedirle a Madonna que se case conmigo. En serio. Si me dice que sí, haré algo que saldrá en los titulares. ¡Voy a comprar una pistola y voy a forzarla a ser una viuda del rock prematura poniéndomela en la cabeza! Pero probablemente no lo haga.
Graham Coxon
A tan extraño poder (el de la costumbre) ¿qué cosa habrá que resista, Pues basta a quitar la vista la costumbre del no ver?
Guillén de Castro
Una idea obsesiva siempre parece una gran idea, no por ser grande, sino porque llena todo el cerebro.
Jacinto Benavente
La muerte hace igual al alto y al bajo.
John Heywood
No supimos disponernos ni para la aparición de un dios ni para el resplandor de su ausencia. Vivimos, sin más, como lo que se sucede en lo precario.
José Carlos Cataño
Es una gran suerte tener pocos parientes.
Menandro
No me obsesiono con ser el más rico del cementerio.
Ramón Melendi
El pecado es como una montaña con dos lados, según corresponda, si se ve antes o después de que se ha alcanzado: Sin embargo, ambos lados son reales.
Samuel Butler