Nuestra vida es un constante viaje, desde el nacimiento hasta la muerte. El paisaje varía, la gente cambia, las necesidades se transforman, pero el tren sigue adelante. La vida es el tren, no la estación.
Paulo Coelho
Todos los hombres desean por naturaleza saber. Así lo indica el amor a los sentidos; pues, al margen de su utilidad, son amados a causa de sí mismos, y el que más de todos el de la vista.
Aristóteles
Elvis está muerto, pero no la música, y cuando yo me vaya, las cosas seguirán como antes.
Bernie Ecclestone
La despedida. Él no pudo impedir que asomaran unas lágrimas al contemplarla y ella creyó firmemente que eran de amor y lloró abrazada al hombre de su vida.
Blanca Miosi
Sólo he dormido con los hombres con los que he estado casada, ¿Cuántas mujeres pueden hacer esa afirmación?
Elizabeth Taylor
Las grandes dificultades no consistieron sólo en luchar con el adversario, pues que con la bandera de los principios interpretados y cumplidos con integridad, era bastante para dominarlo. La dificultad enorme consistió más que nada en hacer que en su seno se mantuviera intacta esa integridad de principios y de postulados indeclinables.
Hipólito Yrigoyen
Las ilusiones perdidas son hojas, desprendidas del árbol del corazón.
José de Espronceda
A Dios no le placen las cosas hechas por la fuerza. Siendo Él, el Dios del amor, quiere que todo se haga por amor.
Juan Bosco
Disfruta de la vida y ayuda a otros a vivir una vida digna de ser disfrutada.
Mario Bunge
Al comprar una casa, piensa en el vecino que adquirirás con ella.
Proverbio
La confianza es lo único que importa.
Rob Lowe
El lenguaje y la imaginación no pueden ser aprisionados.
Salman Rushdie
El matrimonio tiene muchos sinsabores, pero la soltería no goza de ningún placer.
Samuel Johnson
Luz, la hija mayor de Dios, es la principal belleza de un edificio.
Thomas Fuller
Juro por la burra de Balaam que, si sigue callando, haré que se arrepienta de su obstinación. Y diciendo estas palabras, el Califa no pudo evitar lanzar sobre el desconocido una de sus peligrosas miradas; éste ni se inmutó: el ojo asesino no le produjo el menor efecto.
William Beckford
Con el cebo de la mentira se pesca una carpa de verdad.
William Shakespeare