Sólo verdaderas manos escriben verdaderos poemas. No veo ninguna diferencia entre un apretón de manos y un poema.
Paul Celan
Este mundo es un mundo de dos dioses. Es un mundo de construcción y destrucción simultáneas.
Alfred Doblin
La casualidad se puso el disfraz de una mariposa, que al vuelo se entregó soltando su efecto... nos acarició
Amaia Montero
Vengarse es el objetivo de aquellos que se sienten de algún modo derrotados. Yo no estaba vencido, me dije. Y siempre es mucho mas interesante pensar en la victoria que en la venganza.
Anne Rice
La amante que te concede su cuerpo y no su corazón, te regala rosas sin espinas.
Anónimo
Sin Bob, los Beatles no habrían hecho el Sargent Pepper, los Sex Pistols no habrían hecho God Save the Queen y U2 no habría hecho Pride.
Bruce Springsteen
Por ti no pasa nunca el tiempo.
Eliseo Diego
Compensa estar preparado contra el peligro.
Esopo
Lo esencial es el objeto. El error consiste en olvidar que el grano, el algodón, la lana son objetos vitales y estar interesados en ellos sólo por su valor material o especulativo.
Fernand Léger
Con una falta tal de gente con la que coexistir, como hay hoy, ¿qué puede un hombre de sensibilidad hacer, sino inventar sus amigos, o cuando menos, sus compañeros de espíritu?
Fernando Pessoa
Quiero mezclar mi duelo con el duelo de la naturaleza.
Jacques Delille
La justicia se defiende con la razón y no con las armas. No se pierde nada con la paz y puede perderse todo con la guerra.
Juan XXIII
Denme 100 hombres y tomaré el mundo.
Marlene Dietrich
... sólo una crisis -real o percibida- da lugar a un cambio verdadero. Cuando esa crisis tiene lugar, las acciones que se llevan a cabo dependen de las ideas que flotan en el ambiente. Creo que ésa ha de ser nuestra función básica: desarrollar alternativas a las políticas existentes, para mantenerlas vivas y activas hasta que lo políticamente imposible se vuelve políticamente inevitable.
Milton Friedman
Médicos. Hombres de suerte. Sus éxitos brillan al sol... y sus errores los cubre la tierra.
Molière
Un acto de bondad no quita un acto de maldad, ni al revés.
Stephen Dillane