La supervivencia del capitalismo después de dos siglos se debe tanto a sus enemigos como a sus adeptos.
Pascal Bruckner
Todos los sectores sociales deben estar unidos verticalmente por el destino común de la Nación. Se hace imposible pensar la política social sin una política nacional.
Arturo Jauretche
No me retiraré mientras siga manteniendo mis piernas y mi caja de maquillaje.
Bette Davis
Se fue, partió, corrió, escapó.
Cicerón
Creo que hice buenas decisiones en el pasado. Creo que hice buenas decisiones en el futuro.
Dan Quayle
El que no tiene bastante, porque no se limita a lo que tiene o no sabe conservarlo, es, en el más profundo sentido de la frase, un pobre diablo; más que aquel a quien efectivamente falta lo más preciso.
Gotthold Ephraim Lessing
Esto debería llamarse Buenos Aires.
Gustavo Cerati
Pero, mi querido amigo, debo confesarte que, desde que mi pensamiento ha cambiado, ya no existen para mí palabras ambiguas ni dichos: cada palabra tiene decenas, centenares de significados. Y ahí empieza lo que temes... La magia.
Hermann Hesse
Nadie engaña con buen fin: la bellaquería añade su malicia a la mentira.
Jean de la Bruyere
Puedo triunfar en este equipo.
Maximiliano Gastón López
En la guerra, como en política, cualquier mal, aunque no infrinja las normas, sólo es excusable cuando es absolutamente necesario: todo lo que está más allá es crimen.
Napoleón Bonaparte
Los héroes clásicos reflejados en los espejos cóncavos dan el Esperpento. El sentido trágico de la vida española sólo puede darse con una estética sistemáticamente deformada.
Ramón María del Valle-Inclán
La alegría que nace del bien es seria, mientras que la que nace del mal va acompañada de risas y burlas.
René Descartes
Mis antecesores, en seis años, no nombraron nunca a un obrero en nada, y ahora quieren hacer creer a los trabajadores que las empresas deben ser de su propiedad. Les dicen que ellos deben ser dueños del cobre, del carbón, del salitre. ¡Cómo andaría el país!
Salvador Allende
No hay nada que halague más al ego de un hombre que creer que sabe más de todo que una mujer y más aún cuando se trata de amar. En poco tiempo sabrás tú mucho más que él, pero que él nunca lo sepa.
Santiago Posteguillo
Para creer es preciso querer creer.
Silvio Pellico