Quienes contraponen liberalismo y socialismo, o no conocen el primero o no saben los verdaderos objetivos del segundo.
Pablo Iglesias Posse
La conquista fue una gesta de la que se debe estar orgulloso y horrorizado al mismo tiempo.
Arturo Pérez-Reverte
Cada hombre es el arquitecto de su propia fortuna.
Cayo Salostio
Feliz es una nación si no tiene historia.
Cesare Beccaria
He hecho más de 25 álbumes de estudio, y creo que probablemente he hecho dos cosas malolientes reales en mi tiempo, y algunos discos no-malos, y algunos muy buenos álbumes. Estoy orgulloso de lo que he hecho. De hecho, ha sido un buen paseo.
David Bowie
Dichoso quien por mí pena y suspira, si cabe tanto bien en pecho humano.
Fernando de Herrera
La belleza se define como la manifestación sensible de la idea.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
La mujer es coqueta mientras no ama.
Honoré de Balzac
Afirmar que los comunistas son orcos es casi tan estúpido como afirmar que los orcos son comunistas.
J. R. R. Tolkien
Todos los entrenadores hablan sobre movimiento, sobre correr mucho. Yo digo que no es necesario correr tanto. El fútbol es un juego que se juega con el cerebro. Debes estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado, ni demasiado pronto ni demasiado tarde.
Johan Cruyff
La Nación está obligada a conservar y proteger por medio de leyes sabias y justas la libertad personal, civil e individual así como la propiedad y demás derechos legítimos de todos los individuos que la componen.
Juan Pablo Duarte
¡Oh cuán fácilmente nos conceden los dioses las mayores bendiciones, y cuán difícilmente quieren conservárnoslas!
Lucano
Estaba entrenándome en el cross cuando se me acerca un tipo. Me hace muchas preguntas e incluso me pregunta a su hijo. Luego, poco antes de irse me dice: De todas formas, Dovizioso es mejor.
Marco Simoncelli
Se puede admitir la fuerza bruta, pero la razón bruta es insoportable.
Oscar Wilde
Acaben esta guerra...
Richard Holbrooke
Al cavilar sobre las limitaciones del espíritu humano siéntese algo así como abatimientos de rey destronado, nostalgias y desfallecimientos del águila alicortada y prisionera.
Santiago Ramón y Cajal