Que el esposo dé a esposa lo que le es debido; pero que la esposa haga lo mismo también a esposo. La esposa no ejerce autoridad sobre su propio cuerpo, sino su esposo; así mismo, también, el esposo no ejerce autoridad sobre su propio cuerpo, sino su esposa. No se priven el uno al otro, a no ser de común acuerdo por un tiempo señalado...