El Carnaval de Río es el acontecimiento religioso de la raza. Pau-Brasil. Wagner sucumbe ante las Escuelas de Samba de Botafogo. Bárbaro y nuestro. La formación étnica rica. Riqueza vegetal. El mineral. La cocina. El vatapá, el oro y la danza.
Oswald de Andrade
La única cosa que la gente tiene realmente en común es que todos vamos a morir.
Bob Dylan
Escapa de los que compran lo que no necesitan, con dinero que no tienen, para agradar a gente que no vale la pena.
Facundo Cabral
Estamos tan habituados a vivir como una anomalía, en una burbuja de bienestar y seguridad impermeable a las lágrimas ajenas, que no nos es posible atisbar la verdadera realidad del ser humano y de nuestra civilización.
Fernando Gamboa González
Rompiendo mi promesa, de no volverte a verte ni en pintura, me he sentado a tu mesa, Virgen de la Amargura.
Joaquín Sabina
Una vez que escribo la canción creo que se crea una nueva atmósfera en un lugar llamado la 5ta dimensión donde se crea una nueva vida y energía, y deja las cosas mejor y hace nuevos lugares para vivir para los espíritus que frecuentan estos lugares.
John Frusciante
Estados Unidos no entiende a Latinoamérica.
José Luis Rodríguez Zapatero
Se tiene el talento para honrarse con él, no para deshonrar a los demás.
José Martí
Todos los empleados públicos deberían descender a su grado inmediato inferior, porque han sido ascendidos hasta volverse incompetentes.
José Ortega y Gasset
Brillan tanto las lágrimas en los ojos de una niña que nos da lástima besarlas cuando están secas.
Lord Byron
En el campo de la investigación el azar no favorece más que a los espíritus preparados.
Louis Pasteur
El hombre que valora sus amigos generalmente es oro macizo de si mismo.
Marjorie Holmes
¡Los soñadores prácticos no se rinden!
Napoleon Hill
No permitas que una golondrina haga su nido bajo tu tejado.
Pitágoras
Un general inteligente lucha por desproveer al enemigo de sus alimentos.
Sun Tzu
La plegaria, dirigida por los hombres a los dioses y enviada por los dioses a los hombres, sostenía a unos y a otros: y aún el mismo dios del brahmán, el Señor de la Plegaria, necesitaba de ella, aunque fuera el encargado de concederla.
Vicente Fatone