Las discusiones son completamente vulgares, porque en la buena sociedad todo el mundo tiene exactamente las mismas opiniones.
Oscar Wilde
Sería un errorpensar que la ciencia hace artistas. La ciencia les proporciona la ayuda más valiosa.
Adolphe Jacques Lambert Quetelet
En Chile tener ideas propias es ser díscolo.
Alejandro Navarro
No me gustan las drogas, nunca me han gustado. No soy bueno para ese tipo de cosas, no tengo suficiente confianza en mí mismo.
Graham Coxon
La esperanza es la creencia patológica en la materialización de lo imposible.
H. L. Mencken
No puedes bajar dos veces el mismo río, pues nuevas aguas corren sobre ti.
Heráclito
Con esperanza, sin esperanzas y aun contra toda esperanza, la razón es sin embargo nuestro único asidero, por lo que la filosofía no puede renunciar sin traicionarse a la meditación en torno a la razón.
Javier Muguerza
Inventariar perpetuamente lo que se que es, renegar constantemente de sí y refugiarse en una esfera en que no se es ya nada más que una pura y libre mirada.
Jean-Paul Sartre
Con frecuencia solemos caer en la trampa de considerar nuestro, frente a lo nuevo, aquello que tenemos desde hace tiempo aunque, en su origen, nos viniese tan de fuera, nos fuese tan extraño como lo nuevo de ahora.
José Luis López Aranguren
Aceptemos elogios sólo de quienes podrían criticarnos.
José Narosky
Nuestros paladines de la pequeña burguesía quieren precisamente que se conserve la sujeción del campesino a la tierra, pero rechazan el régimen de la servidumbre, el único que garantizaba esta sujeción y fue desterrado sólo por la economía mercantil y por el capitalismo que la hicieron imposible.
Lenin
Cuando el razonamiento sano y el amor tanto el propio como el que se siente hacia los demás se ponga arriba en la vida, el hombre se hará el verdadero creador de su propia existencia.
Néstor Majnó
El rey, justo y prudente, sólo quiere lo que él puede conseguir.
Pierre Corneille
De dinero y calidad, la mitad de la mitad.
Proverbio
Sólo en la fortuna adversa se hallan las grandes lecciones del heroísmo.
Séneca
Cuando las órdenes se dan de manera clara, sencilla y consecuente a las tropas, éstas las aceptan. Cuando las órdenes son confusas, contradictorias y cambiantes las tropas no las aceptan o no las entienden. Cuando las órdenes son razonables, justas, sencillas, claras y consecuentes, existe una satisfacción recíproca entre el líder y el grupo.
Sun Tzu