Un hombre que es dueño de sí mismo pone fin a un pesar tan fácilmente como inventa un placer. No quiero estar a merced de mis emociones. Quiero usarlas, disfrutarlas, dominarlas.
Oscar Wilde
En el atardecer de nuestras vidas, se nos juzgará por el amor.
Carmen Posadas
¡Qué tropa, joder, qué tropa!
Conde de Romanones
He visto todas tus películas, incluso esas de los superhéroes que hacías de Magneto. (a José Sacristán)
Dani Rovira
Casos como éstos, en los que la muchedumbre derrocha perversión y demencia, no abundan, y tal vez por eso me apasioné en el grado en que lo hice -al margen de mi rechazo en tanto que hombre- como novelista, como dramaturgo, trastornado de entusiasmo ante un caso de belleza tan atroz.
Émile Zola
Gané carreras, gané títulos, conseguí 'poles', tuve grandes sensaciones en estos nuevo años en Fórmula 1. Pero dar este pequeño paso suplementario, conducir un coche de la 'Scuderia', era lo que me faltaba para alcanzar la perfección.
Fernando Alonso
Fatigas, pero no tantas, que a fuerza de muchos golpes hasta el hierro se quebranta.
Manuel Machado
Las cosas sólo tienen el valor que les damos.
Molière
Pero tú, despertando, me hundiste en tus ojos.
Rafael Alberti
No necesito alas para volar, prefiero LSD.
Roberto Iniesta
El malo lo es por ignorancia, y por tanto se cura de ello con la sabiduría.
Sócrates
No sé durante cuánto tiempo puedo seguir tirando sin un amigo. Antes podía hacerlo fácilmente, pero eso era antes de saber cómo era tener un amigo.
Stephen Chbosky
¿Cómo voy a declarar por dioses a la leña y a las piedras?
Taciano
La fe es una de las fuerzas orgánicas más poderosas, puede que no sea capaz de mover montañas, al menos en el sentido literal, pero puede crear a alguien que sí sea capaz de hacerlo.
Terry Pratchett
Si una metafísica y una física como estas no son como filosofía, es que nada lo es, y San Pablo no habría tenido necesidad de advertirnos que nos guardásemos de ella.
Thomas Hobbes
Si todos los países se comprometen a la no intervención en los asuntos internos del otro, los pueblos de los diversos países podrán elegir, según su propia voluntad, su sistema político y su modo de vida.
Zhou Enlai