La muerte y la vulgaridad son los únicos dos hechos que en el siglo XIX no han podido ser explicados satisfactoriamente.
Oscar Wilde
Un viajero sabio nunca desprecia su propio país.
Carlo Goldoni
Hermanos de mi patria.
Carlos Menem
Las bestias son felices porque cuando mueren sus almas se disuelven pronto en los elementos, mientras la mía vivirá para ser atormentada en el infierno y maldecida por los padres que me engendraron.
Christopher Marlowe
Las universidades no crean tontos, solamente los desarrollan.
George Horace Lorimer
El hombre es esencialmente un ser social; con mayor razón, se puede decir que es un ser familiar.
Juan Pablo II
Todavía no conozco el amor. No creo que llegue a tener novio. - En el momento en que conozcas a la persona de la que te estoy hablando, conocerás el amor. Ése es tu destino.
Junichiro Tanizaki
Los hombres no quieren la verdad, no quieren sino que se les disfrace la mentira.
Louis Dumur
Internet es mucho más que una tecnología. Es un medio de comunicación, de interacción y de organización social.
Manuel Castells
Nuestra convivencia necesita de las palabras, nuestra coexistencia pacífica está hecha de debate y de discusión, de desavenencias razonables y razonadas, nuestra democracia necesita de las palabras y, en consecuencia, de las actividades que promueven, estimulan y aconsejan su uso. Lectura y democracia van de la mano.
Manuel Gil
A mí me enseñaron en la escuela que nunca se debe empezar una frase sin saber el final de la misma.
Paul Dirac
Un tonto pobre siempre será un tonto. Un tonto rico será siempre rico.
Paul Lafitte
Cristo no murió en la cruz para limpiar a los hombres de sus pecados, fue crucificado porque estaban locos.
Philip K. Dick
La razón es la propiedad mejor repartida entre los hombres, pues ninguno reclama más cantidad de ella, porque todos creen tener la suficiente.
René Descartes
Las posibilidades de una entre un millón salen bien nueve de cada diez veces.
Terry Pratchett
Si el amor y el deber se encuentran, empieza el estado de gracia y se llega a una felicidad que es muy difícil imaginar.
William Somerset Maugham