Se puede reconocer siempre a las mujeres que tienen confianza en sus maridos: ¡parecen tan profundamente desdichadas!
Oscar Wilde
Dale suave, mi amor, porque en esta casa, te amamos.
Andrés López
En el Estado puede gobernar más de uno; pero en la familia, uno solo.
Aristóteles
No el que vence a miles de enemigos en la batalla, si no el que se vence a sí mismo, es el máximo vencedor.
Buda Gautama
En México, todavía, el valor de caudillos, mártires, artistas notables y valores del hogar sólido se determina por el número de estatuas que consiguen, y por la mezcla de terquedad y docilidad con que monumentos y bustos aceptan el avance omnívoro de lo urbano. Y que se cuiden los iconoclastas. Ya lo advirtió Jean Cocteau: El riesgo de un destructor de estatuas es convertirse en una.
Carlos Monsiváis
Envío a Chiara el respeto y la estima de la Iglesia de Constantinopla por su monumental labor de promoción de un amor basado en el Evangelio, entre personas de distintas creencias y formaciones. Me alegro de haber podido visitar a Chiara durante mi último viaje a Roma. Que su alma pueda encontrar la paz allí donde reposan los justos y dondo no existen el dolor, el sufrimiento ni el luto.
Chiara Lubich
Esta es una banda que salvará tu vida.
Frank Iero
La ciencia nos ha prometido la verdad; nunca nos prometió la paz ni la felicidad.
Gustave Le Bon
¿El secreto de mis éxitos? Yo pinto siempre a las mujeres más delgadas de lo que son, y a sus joyas, más grandes.
Kees van Dongen
Es un mal soldado el que no aspira a ser general.
Marlene Dietrich
Toda mi existencia y vida espiritual ha sido inundada por la cultura pop, desde juguetes hasta revistas, desde música hasta películas. A partir de ahí se derrama en mi creatividad con total naturalidad.
Michael Allred
Yo creo que la madre de la mayor parte de las falsas ideas, públicas y privadas es la excesiva buena opinión que el hombre tiene de sí mismo.
Michel de Montaigne
Lo importante es que el sexo no haya sido únicamente una cuestión de sensación y de placer, de ley o de interdicción, sino también de verdad y de falsedad, que la verdad del sexo haya llegado a ser algo esencial, útil o peligroso, precioso o temible; en suma, que el sexo haya sido constituido como una apuesta en el juego de la verdad.
Michel Foucault
La fe consiste en aceptar las afirmaciones del alma; y la ausencia de fe, en negarlas.
Ralph Waldo Emerson
Siempre he dependido de la amabilidad de los extraños.
Tennessee Williams
El mayor infortunio del hombre de letras no es quizá el hecho de ser víctima de las intrigas y la envidia de sus colegas y el verse despreciado por lo hombres poderosos, sino el verse juzgado por los necios.
Voltaire