Pues si todo lo tienes en el vino, dime, mercader, ¿por qué lo vendes?
Omar Jayam
¡Oh, Platón!, el caballo sí lo veo; pero la equinidad no la veo.
Antístenes
... los israeilitas no lograron formar, a partir de tantos milagros, una idea correcta de Dios, como la misma experiencia ha confirmado.
Baruch Spinoza
La buena música es la que te dice cosas, suena bien y no transforma a los que la escuchan en completos pelotudos.
Charly García
Soy huérfano. Deambulo por el Dunsboro colonial con los pollos deformes de nacimiento, los ciudadanos drogadictos y los niños de la excursión que creen que este jaleo tiene algo que ver con el pasado real. Uno puede fingir. Uno puede engañarse, pero no se puede recrear lo que ya terminó.
Chuck Palahniuk
Por lo que toca a las mujeres, se trata de engaños recíprocos que no entran en la cuenta, porque cuando el amor se mete por medio, es cosa común que los unos engañen a los otros.
Giacomo Casanova
No creo en la mala suerte, sí en que algo se hizo mal.
Jim Clark
A veces el amor nos lleva a sitios complejos. Pero nunca podemos renunciar a nosotros mismos.
Juan Gómez-Jurado
El capitalismo actual, señor absoluto en la vida de la economía, educa y crea por la vía de la selección económica los sujetos, empresarios y trabajadores, que necesita.
Max Weber
Para un buen matrimonio hay que enamorarse muchas veces, siempre de la misma persona.
Mignon McLaughlin
Teme que el barro crezca en un momento, teme que crezca y suba y cubra tierna, tierna y celosamente tu tobillo de junco, mi tormento, teme que inunde el nardo de tu pierna y crezca más y ascienda hasta tu frente.
Miguel Hernández
Disfruta de la vida sin compararla con la de los demás.
Nicolas de Condorcet
Se va la juventud año tras año; los días de promavera son fugaces y las frágiles flores mueren pronto. El sabio nos advierte que la vida es tan sólo una gota de rocío en una hoja de loto.
Rabindranath Tagore
La brisa viene fresca y perfumada, no sé qué pasa en mí, la noche tiene para mi corazón todas las lágrimas, y yo siento un vacío sobre el pecho y una paz infinita sobre el alma.
Rafael Lasso de la Vega
Las batallas se pueden ganar con el corazón, pero las guerras sólo se pueden ganar con la cabeza.
Santiago Posteguillo
Cuando llegues al final de lo que debes saber, estarás al principio de lo que debes sentir.
Yibrán Jalil Yibrán