Una vida de placeres es, por eso mismo, la menos placentera del mundo.
Oliver Goldsmith
Dios, en cambio, por ser la primera causa de todas las cosas y causa también de sí mismo, se hace conocer a sí mismo por sí mismo.
Baruch Spinoza
No estéis pesarosos de que nadie os conozca; trabajad para haceros dignos de ser conocidos.
Confucio
Para hacer mal cualquiera es poderoso.
Fray Luis de León
¿No es razonar de la misma manera concluir que un objeto no comporta ni extensión ni forma porque a los ojos de un observador parezca pequeño, liso o redondo, y a los ojos de otro observador y en el mismo momento parezca grande, rugoso y anguloso?
George Berkeley
La esencia de un actor, sea profesional o no, desde mi punto de vista, es buscar la verdad y buscar que las cosas que haces sean verosímiles y creíbles.
Luis Tosar
Para corregir un error, hay que sobrepasar los limites justos: de otra manera, el error no será corregido.
Mao Zedong
Entre los míos hay un código, luchas por el compañero que lucha a tu lado.
Mark Wahlberg
No hay cosa más mediocre en el mundo que la posesión de una mujer, amigo mío; quien ha tenido una, ha tenido ciento: la única forma de alejar la monotonía de esos triunfos insípidos, es deberlos sólo a la astucia y únicamente sobre los restos de un tropel de prejuicios vencidos pueden encontrarse algunos encantos.
Marqués de Sade
En este negocio hay que contar con los rumores y la presión. Tengo la sensación de que en cualquier momento podría encontrarme sin empleo.
Matt Damon
Y nada podrá contra la vida porque nada pudo jamás contra la vida.
Otto René Castillo
Lo que mata una relación entre dos personas es precisamente la falta de desafíos, la sensación de que ya no hay nada nuevo. Tenemos que seguir siendo una sorpresa el uno para el otro.
Paulo Coelho
La apariencia posee la plenitud de la realidad, pero sólo en cuanto apariencia. En cuanto cosa distinta de apariencia, es error.
Simone Weil
Tantos átomos, atemorizados por una macro molécula.
Valeriu Butulescu
Está pronto a decir siempre tu opinión, y el ruin te evitará.
William Blake
El placer de odiar, como un mineral venenoso, roe el corazón de la religión y la torna rencor doliente e intolerancia.
William Hazlitt