Todo lo individual por sí tiene una medida propia de aptitud, sólo la capacidad del género es inmensurable.
Novalis
Quizá la única lección que nos enseña la historia es que los seres humanos no aprendemos nada de las lecciones de la historia.
Aldous Huxley
La salud de muchos hubiera sido mejor si sus riquezas hubieran sido menores.
Benjamin Franklin
Como en la historia, cada uno tendrá que descubrir por sí mismo su propio camino.
Fernando Meirelles
Una prueba convincente de que el hombre no ha sido creado tal y como él parece, es que, a medida que se vuelve más juicioso, más se avergüenza de la extravagancia, de la bajeza y de la corrupción de sus sentimientos e inclinaciones.
François de La Rochefoucauld
Aquella vez, en París, cuando llegué al vestuario, me felicitaba todo el mundo, y lo primero que pensé fue: debo ser el peor campeón de Roland Garros de la historia.
Gastón Gaudio
Nunca me voy a casar. No creo en el matrimonio. Soy un dictador y la vida en común es imposible, aunque eso no significa que no conviva en pareja.
Guillermo Vilas
¡Señoras! ¿Queréis hacer el favor de callaros? Escuchadme. Sí, te mentí. No, no te quiero. Por supuesto que te hace gorda. Nunca he estado en Bruselas. Se pronuncia egregio. Por cierto, no, nunca conocí a Pizarro, pero me encantan sus obras. Y todo esto carece de importancia a la luz del hecho de que mi barco ha vuelto a desaparecer, ¿comprendéis?
Johnny Depp
La vida consiste en perseguir tus sueños uno detrás de otro. Si alcanzas uno, pues a por otro.
Juliette Binoche
Es que no importa el contenido de la acción. Al darse cuenta de que existen seres desconocidos, imposibles de distinguir, la gente empieza a desconfiar de todo, a cuestionarse, a delatarse, a calumniarse mutuamente, hasta convertir la sociedad en un nido de agentes secretos.
Kōbō Abe
Un mundo, un elenco, una ruta de acceso.
Kuvempu
¿Por cuánto tiempo deberemos extrañar a aquellos que ya se han ido? El dolor de hoy es nuestro propio mañana.
Murasaki Shikibu
El más sabio es quien siéndolo ignora que lo es.
Nicolás Boileau
Él no sabía por qué aquella vieja robaba cabellos; por consiguiente, no podía juzgar su conducta. Pero a los ojos del sirviente, despojar de las cabelleras a los muertos de Rashomon, y en una noche de tormenta como ésa, cobraba toda la apariencia de un pecado imperdonable. Naturalmente, este nuevo espectáculo le había hecho olvidar que sólo momentos antes él mismo había pensado hacerse ladrón.
Ryunosuke Akutagawa
La felicidad suprema en la vida es tener la convicción de que nos aman por lo que somos, o mejor dicho, a pesar de lo que somos.
Victor Hugo
La esencia de la acción es transgredir con una energía irracional el límite en el que está fijado la racionalidad.
Yukio Mishima