El papel natural del hombre del siglo XX es la angustia.
Norman Mailer
El humanitarismo consiste en no sacrificar jamás un ser humano a un objetivo.
Albert Schweitzer
Es el final del laberinto el que nos devuelve al punto de partida. Pero cada vez que encontramos la salida, el laberinto es otro.
Alejandro Lanús
Es invierno y nieva.
Ana Botella
Soy como el agua y el aceite, sin algún sabor especial.
Annatell
La Ilusión despierta el empeño y solamente la paciencia lo termina.
Anónimo
Hay ocasiones en que no debe decirse nada, y otras en que hay que decir algo; pero ninguna en que haya de decirse todo.
No quiero sonar nostálgico, pero en algún punto de sus vidas, toda persona tiene un amigo al cual quiere y por el cual se preocupa mucho. Esa persona es tan cercana y querida que puedes compartir con él, cosas que no puedes hacer con nadie más. Por ejemplo, puedes llamar a ese amigo y reírte con él por teléfono desde cualquier chiste al límite de la carcajada demente.
Christopher Lee
Todo eso que tenemos delante y detrás de nosotros es poca cosa comparado con lo que vive en nuestro interior.
Deepak Chopra
Quiero sentir la música más alta y tocar las pistas de esquí.
Inna
Y aunque quiera olvidar no se me olvida, que no puedo olvidarte.
Joaquín Sabina
La mente del hombre es como una tienda de idolatrías y supersticiones.
Juan Calvino
A Riquelme le vi hacer cosas increíbles con el balón. Tiene talento y es un líder. Y que no digan tonterías, que es lento y esas cosas; todo Brasil se quedó alucinado cuando se enfrentó al Palmeiras en la Copa Libertadores. Sólo un fenómeno hace lo que él hizo esa noche.
Juan Román Riquelme
Para mí, la soledad es necesaria; practicamente es vital.
Luis Miguel
En Navidad, todos los caminos llevan a casa.
Marjorie Holmes
La carga moral decidida por la sociedad para todas las transgresiones golpea todavía más hoy la pasión que el sexo. Todo el mundo comprenderá que X... Tenga enormes problemas con su sexualidad; pero nadie se interesará en los que Y... Pueda tener con su sentimentalidad: el amor es obsceno en que precisamente pone lo sentimental en el lugar de lo sexual.
Roland Barthes