Rechaza enérgicamente toda sombra de melancolía. Nunca es más apropiada la palabra "sombra". Sí, la melancolía es una sombra que nos impide gozar de una luz y del calor del sol.
Noel Clarasó
Cuando nos vimos por primera vez, no hicimos sino recordarnos. Aunque te parezca absurdo, yo he llorado cuando tuve conciencia de mi amor hacia ti, por no haberte querido toda la vida.
Antonio Machado
¡Pobre del amor a quien la fantasía abandona!
Arturo Graf
Mi país favorito es Finlandia porque una vez que se llega a un cierto punto, se puede conducir durante horas sin ver una sola persona. Me encanta la paz y tranquilidad.
Christopher Lee
Al decirte que estoy enamorada de ti, lo que en realidad quiero confesarte es que ya no me gusta esta vida de burdel. Quiero que me lleves contigo.
Daniel Sada
La felicidad no es un objetivo, sino que es un producto.
Eleanor Roosevelt
..., y de la diferencia nace la discordia, y de la discordia viene el apartamiento de la unidad.
Erasmo de Róterdam
Los demonios no son los que le han crucificado, eres tú quien con ellos lo has crucificado y lo sigues crucificando todavía, deleitándote en los vicios y en los pecados.
Francisco de Asís
El hombre honrado a carta cabal queda siempre como un caballero, pero se queda siempre donde está; raras veces avanza.
Friedrich von Logau
La gente suele pelear en general sólo porque no puede discutir.
Gilbert Keith Chesterton
A medida que se asciende en la escala de los seres, la facultad nerviosa aumenta, es decir, la facultad de sufrir. Así, pues, ¿serán una cosa misma sufrir y pensar?
Gustave Flaubert
Los malvados no deben ser exterminados. Querer hacerlo es señal de unilateralidad. Lo importante no es erradicarlos, sino combatirlos. Y ni siquiera combatirlos, sino combatir. No debemos jamás destruir la oposición dialéctica, sino mantenerla.
Horst Matthai Quelle
Afirmar nietzscheanamente que no hay hechos, sino sólo interpretaciones implica algo fundamental: que quien habla desconoce los hechos.
Jesús G. Maestro
Elogiar a todos por igual es no elogiar a ninguno.
John Gay
Un hombre estaba tan enfadado conmigo que terminó su carta diciéndome: tenga cuidado, usted no saldrá vivo de este mundo.
John Steinbeck
La conversación privada que la persona tiene con Dios se transforma, más tarde, en redención y salvación para sus hijos.
Najman de Breslev