La necesidad de amar es una parte de la naturaleza de la mujer.
Ninon de Lenclos
Igual que con el hombre del cuento, que convierte en oro todo lo que toca, en mi caso se convierte todo en griterío de periódicos.
Albert Einstein
La educación consiste en tomar a un niño de la mano para sacarlo de sí mismo y abrirle los ojos a que todo ser humano es algo excepcional, darle las claves de las ciencias y hacer de él alguien exigente par sí mismo y los demás.
Albert Jacquard
Él (George W. Bush) no tomará la iniciativa en la protección del medio ambiente y la creación de nuevos puestos de trabajo en tecnologías ambientales para el siglo 21, pero yo lo haré. ¿Y saben qué más? El no tiene a Al Gore, y yo sí.
Bill Clinton
Una de las trampas de la infancia es que no hace falta comprender algo para sentirlo. Para cuando la razón es capaz de entender lo sucedido, las heridas en el corazón ya son demasiado profundas.
Carlos Ruiz Zafón
... yo prefiero hacer tipos normales. Tipos normales, en todo caso, en los que mis anormalidades puedan entrar como si fueran del personaje y luego darle un toque.
Daniel Hendler
León repuso con viveza que casi nadie es capaz de comprender a los seres que tienden hacia un ideal.
Gustave Flaubert
Hemos perdido las mismas ilusiones, hemos seguido los mismos caminos.
Jean-Paul Sartre
Quieres cambio sin sacrificio. Quieres paz sin lucha. El mundo no funciona así.
Jeff Daniels
Véante mis ojos, pues eres lumbre de ellos, y sólo para ti quiero tenerlos.
Juan de la Cruz
El mío es un gobierno hormonado y testiculado.
Julio César Turbay
Y mañana seguirán con fuego en los pies quemando olvido, silencio y perdón, van saltando todos los charcos del dolor que sangró, desparramando fe, las madres del amor.
León Gieco
Casarse con una determinada persona es, si se acierta, el fundamento de una vida feliz.
Maurice Baring
Pronto cansa la altanería de una mujer hermosa; nunca aburre la de una mujer buena.
Montesquieu
Busco una calma inalcanzable, la atmósfera aquí no es fiable... quiero estar solo si solo todo estará bien.
Nach
Pequeñas mesitas laqueadas de rojo ponían al alcance de la mano chucherías de bronce. El aire aromatizaba simultáneamente a sándalo, a jazmín, a incienso y azahar. Piter se sentía embriagado de una esencia misteriosa más sutil, que parecía flotar permanentemente bajo el volumen de los olores inmediatos.
Roberto Arlt