Castigar a uno o dos transgresores para que sirva de ejemplo es más benévolo que ser demasiado compasivo.
Nicolás Maquiavelo
Me tomo un vaso de agua y muero en la sed de tu cuerpo.
Armando Uribe Arce
El silencio hace que hasta los necios parezcan sabios durante un minuto.
Carlos Ruiz Zafón
Los militantes que matan para castigar la discrepancia son tan criminales como los militares que matan para perpetuar la injusticia.
Eduardo Galeano
Es increíble que la perspectiva de tener un biógrafo no haya hecho desistir a nadie de tener una vida.
Emil Cioran
La raíz del deseoreligioso es la nostalgia del padre y el fantasma infantil de ser el centro del mundo.
Emmanuel Carrère
Nunca debes tener más hijos que las ventanillas que tienes en el coche.
Erma Bombeck
Y ante éstas me he cuestionado si alguien se puede ganar que otro le niegue el derecho de volver a respirar. De que lo priven de todo, su futuro y sus recuerdos, por la ofensa imperdonable de que no vive de acuerdo.
Fernando Delgadillo
Cuando el hombre se pone a reír a carcajadas, supera a todos los animales en vulgaridad.
Friedrich Nietzsche
Es indigno de hombres excelentes desperdiciar las horas como esclavos en la labor de calcular lo que sin riesgo podría relegarse a alguien más si se utilizaran máquinas.
Gottfried Leibniz
Eliminad de una comunidad la murmuración y la parcialidad, y se gozará de una paz perfecta.
Juan Bosco
El pesismismo es el precio inevitable que se paga por la lucidez.
Marqués de Tamarón
Todos los hombres golpean a sus mujeres: la gente del pueblo, con sus puños; los burgueses, con las leyes.
Maurice Donnay
El libro es enseñanza y ejemplo. Es luz y revelación.
Nicolás Avellaneda
Muchas palabras no son signo de ánimo prudente.
Tales de Mileto
Si en vez de fomentar entre nosotros el recelo, el temor, el rechazo o el antagonismo nos basamos en el terreno común que nos brinda el deseo de liberar a las naciones de los sufrimientos y penalidades infligidas por el colonialismo, podremos conocernos mejor, respetarnos más, ser más solidarios unos con otros y ofrecernos mutuamente mayor apoyo.
Zhou Enlai