Al final, la gente que sufre tiene que ‘querer’ seguir adelante, que el primer paso, esa chispa de motivación, tiene que salir de ellos. Y cuando lo hace, abre la puerta a lo inesperado.
Nicholas Sparks
Una vida grande nace del encuentro de un gran carácter y una gran casualidad.
André Maurois
Ligerito resucita.
Anónimo
El coraje no es la ausencia de temor, sino la capacidad de actuar a pesar de este.
Bernardo Stamateas
Dicen que la historia se repite, lo cierto es que sus lecciones no se aprovechan.
Camille Sée
El noble no expresa nunca su parecer sobre las cosas que no comprende. Busca la máxima precisión en sus palabras; esto es lo más importante.
Confucio
Si se coloca el centro de gravedad de la vida en el más allá, se ha arrebatado el centro de gravedad de la vida en general.
Friedrich Nietzsche
Constituye una dificultad para la filosofía el hecho de que la mayoría piense que la autoconciecia no contiene más que la existencia particular empírica del individuo.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
No hay listas con el destino final de los desaparecidos. Podría haber listas parciales, pero desprolijas.
Jorge Rafael Videla
El 11 de marzo de 2004 ocupa ya su lugar en la historia de la infamia.
José María Aznar
Dado que Él me creó, ¡Él me quiere! ¡Él me ama!.
Najman de Breslev
El más grande de los hombres sencillos, nuestro maestro.
Pablo Neruda
Si el mal existe, está escondido en nuestros miedos.
Paulo Coelho
Causa es de perder lo seguro ir en busca de lo incierto.
Plauto
Se dejó arrastrar por los impulsos que retuercen al hombre que se siente por primera vez a las puertas de la cárcel, impulsos ciegos que conducen a un desdichado a jugarse la vida en un naipe o en una mujer. Quizá buscando en el naipe y en la hembra una consolación brutal y triste, quizá buscando en todo lo más vil y hundido cierta certidumbre de pureza que lo salvará definitivamente.
Roberto Arlt
Tu deseo sea de ver a Dios; tu temor, si le has de perder; tu dolor, que no le gozas, y tu gozo, de lo que te puede llevar allá, y vivirás con gran paz.
Teresa de Jesús