Los comunistas son los últimos optimistas.
Nadine Gordimer
Se busca una unidad místico-sentimental, que es lo que buscaba el franquismo, una unidad de destino universal. Estas eran las frases clásicas de Franco. Lo que funciona bien para el nacionalismo es un cierto totalitarismo, aunque se ponga bajo la excusa de la democracia.
Albert Boadella
Odiar a alguien es otorgarle demasiada importancia.
Anónimo
Pues es imposible o no es fácil hacer el bien cuando se está desprovisto de recursos.
Aristóteles
Pensar es una actividad muy solitaria.
Barbara Sukowa
El individuo que se arrepiente verdaderamente no sólo ve el pecado como detestable y ruin, merecedor de aborrecimiento, sino que realmente lo aborrece, lo odia en su corazón.
Charles Finney
Mientras tengas energía que puedas repartir, ¿qué mejor que darla?
Chenoa
Nunca me ha gustado que la gente diga cosas como Fulanito ha llegado a lo más alto... Llegar a la cima implica que es hora de iniciar un nuevo proyecto. Recibirse en la Universidad no es un final, sino el comienzo de algo nuevo.
Donald Trump
Arrabalescos de Fernando Arrabal.
Fernando Arrabal
Sólo el amor criminal es más fuerte que el amor maternal, puesto que la adúltera abandona a sus hijos.
Ignacio Manuel Altamirano
Sé hombre, sé justo, y admite que, encima de la ambición, de la intriga y del odio, está la Patria, está la eternidad del pueblo, y que ahí debemos encontrarnos siempre, aún si no estamos siempre de acuerdo.
Ion Antonescu
SOPAS, no hay nadie.. pero timbraron ¿sera el doctor Galan que vino a jalarle las patas a toda la clientela del edificio?
Jaime Garzón
Y una vez que usted aprende cuán bueno es en verdad, usted nunca se decide a jugar en un nivel inferior al de su potencial.
John C. Maxwell
La matemática aplicada necesita de la matemática pura tanto como los hormigueros necesitan de las hormigas.
Paul Halmos
Te estás enamorando... De África.
Rob Lowe
¡Stalin! ¡El gran Stalin! Es probable que tuviera una voluntad de hierro, pero era más débil de carácter que cualquiera. Un esclavo del tiempo y de las circustancias, resignado y humilde servidor del día de hoy que abre de par en par la puerta a los nuevos tiempos. Sí, y los que no se postraron ante los nuevos tiempos acabaron en la basura.
Vasili Grossman