Es el valor de un reino decadente donde el país que vela por la paz mundial es el que mas armas vende.
Nach
Lo que pensamos determina lo que somos y lo que hacemos, y, recíprocamente, lo que hacemos y lo que somos determina lo que pensamos.
Aldous Huxley
No pienses en los problemas como dificultades, sino como oportunidades de acción.
Anónimo
El tigre real, el amo, el solo, el sol de los carnívoros, espera, está herido y hambriento, tiene sed de carne, hambre de agua.
Eduardo Lizalde
Quien se detiene en el camino de la virtud, ya ha retrocedido sin darse cuenta de ello.
Foción
Ocho libros en seis años. Basta leer una sola página de cualquiera de ellos para entenderlo todo: la obra completa de Álvaro Mutis, su vida misma, son las de un vidente que sabe a ciencia cierta que nunca volveremos a encontrar el paraíso perdido. Es decir: Maqroll no es él sólo, que como con tanta facilidad se dice. Maqroll somos todos.
Gabriel García Márquez
Hacen falta dos para decir la verdad; uno que hable y otro que escuche.
Henry David Thoreau
Un crítico puede ser constructivo, pero nunca llegará a ser objetivo.
Lluis Pascual
El dinero envenena cuando se tiene y mata de hambre cuando se carece de él.
Máximo Gorki
Tenemos un poder ilimitado, recursos infinitos, en nuestro "gran interior", pero hasta que nos despertamos a una conciencia de este poder oculto, esos recursos invisibles no podemos utilizarlos.
Orison Swett Marden
Volveremos a estar juntos en este mundo o en el siguiente.
Orlando Bloom
Si verdaderamente crees que has aprendido alguna cosa buena entre nosotros, ¿verdad que opinarás que no sólo los humanos deben vivir en la tierra?
Selma Lagerlöf
¿Podía acaso un corazón congelado y muerto estar roto? Sentía como si el mío lo estuviera.
Stephenie Meyer
La idea de la vida y la supervivencia de las obras es preciso entenderla de manera nada metafórica, sino bien objetiva. Que no se puede atribuir la vida a la corporalidad orgánica tan sólo se ha aceptado hasta en tiempos de máxima confusión del pensamiento.
Walter Benjamin
Él que sobre todas las cosas amaba la muerte, y que quizá sólo amaba a la muerte, amó y vivió con deliberada y pervertida curiosidad, tal y como ama un enamorado que deliberadamente se reprime ante el prodigioso cuerpo complaciente, dispuesto y tierno de su amada, hasta que no puede soportarlo y entonces se lanza, se arroja, renunciando a todo, ahogándose.
William Faulkner
Me amenazó gravemente y me vilipendió
William Tyndale