Tenemos una sola vida, sino que pronto será pasado, lo que hacemos por Dios es todo lo que va a durar.
Muhammad Ali
Tú sueñas, ay, tú duermes, tú conoces el día; tú me dices adiós y adiós es nunca.
Armando Uribe Arce
Lo inacabado tiene un profundo encanto. Esta fuerza rota, este impulso interrumpido, este vuelo detenido, ¿qué hubieran podido ser y adónde hubieran podido llegar?
Azorín
Todas las emociones son, en esencia, impulsos que nos llevan a actuar, programas de reacción automática con los que nos ha dotado la evolución.
Daniel Goleman
El imperio tiene oro para sus amigos, hierro para sus enemigos.
Flavio Marciano Augusto
Preparar un discurso de diez minutos me cuesta un par de semanas; un discurso de una hora, una semana, y un discurso de dos horas siempre puedo improvisarlo.
Harold Wilson
Sobre el pavimento helado los copos de nieve caían en silencio como una lluvia de infinitas plumas.
Haruki Murakami
El secreto de mi éxito está en vender como si estuviera en quiebra pagando como si me sobrara el dinero.
Henry Ford
Tiene que haber un conflicto principal que motive al personaje a lo largo de la novela.
Jean Larser
Se debe estar dispuesto a arriesgar todo para expresarlo todo.
John Cassavetes
Me gusta el ajedrez porque es un buen descanso; hace trabajar la mente, pero de una forma muy especial.
León Tolstói
A las mujeres hay que conquistarlas con dulzura, pero no con mucha dulzura, porque engordan.
Luis Sánchez Polack
Odio cuando la gente sale de los recitales diciendo no cantaron tal o cual canción. ¿Qué más quieren por 10 dólares? ¡¿Quieren sangre?!
Noel Gallagher
El Yo descarta la ilusión de yo y, sin embargo, sigue siendo yo. Ésa es la paradoja de la autorrealización. En lugar del yo original, la autoentrega perfecta deja un residuo de Dios en el cual el yo se pierde. Ésa es la forma más alta de devoción y entrega y la culminación del desapego.
Ramana Maharshi
Creo que los arquitectos deberían convertirse en algo mucho más político, más antropológico y más económico.
Rem Koolhaas
La muerte de Rue me ha obligado a enfrentarme a mi furia contra la crueldad, contra la injusticia a la que nos someten.
Suzanne Collins