Tan pronto como te ocupas del bien y el mal de tus semejantes, creas una abertura en tu corazón por la que entra la malicia. Examinar, competir y criticar a otros te debilita y te derrota.
Morihei Ueshiba
Cuando las mujeres entran a desempeñar oficios de hombres, ¡qué pronto se apropian todos sus defectos!
Albert Guinon
La muerte de una relación empieza cuando las personas oyen las palabras pronunciadas por la boca, sin prestar atención a sus sentimientos.
Blanca Miosi
Toda la hueste cristiana está derrotada y Dios desde lo alto ha castigado mi maldecido y odioso perjurio. ¡Oh, justo y terrible castigador de pecados, haz que el deshonor de los dolores que siento en esta mi mortal y harto bien merecida herida, termine mi penitencia con mi repentina muerte! Y haz que esta muerte, siquiera muera yo en pecado, engendre una segunda vida de eterna clemencia.
Christopher Marlowe
Obtendré un gran placer, incluso una gran alegría, si te sometes. Cuanto más te sometas, mayor será mi alegría. La ecuación es muy sencilla.
Erika Leonard
Me he sentido más satisfecho como actor que como director, quizá tengo un mayor dominio de esta primera profesión.
Fernando Fernán Gómez
Un espíritu que quiere cosas grandes, que quiere también los medios para conseguirlas, es necesariamente un escéptico. El estar libre de toda especie de convicciones, el poder-mirar-libremente, forma parte de la fortaleza...
Friedrich Nietzsche
Dos tragedias hay en la vida: una es no conseguir lo que el corazón desea, la otra es conseguirlo.
George Bernard Shaw
Me reconozco inútil como una finca abandonada.
Grace Kelly
Porque he vivido aferrándome trabajosamente a este mundo, y ahora, a la menor ráfaga de viento, igual que una muda de insecto que cuelga de la rama de un árbol, podría salir volando y perderme para siempre.
Haruki Murakami
Supo convertir su amor por este elemento arbóreo, como ocurre con todos los amores verdaderos, en algo despiadado y doloroso, que hiere y cercena para hacer crecer y dar forma.
Italo Calvino
En la tremenda corriente contemplo el último instante de mi vida. La corriente es tan fuerte que lo arrastraría todo, incluso piedras, una catedral, una ciudad. Hay una tempestad que ruge en el interior de las aguas del río. Del viento que se debate.
Marguerite Duras
No acariciés jamás a vuestro marido en forma insistente sino cuando sintáis deseo de engañarlo.
Marqués de Sade
Nosotros decimos que un hombre debe ser moderado, pero no excesivamente sabio, para no correr el riesgo de conocer su destino de antemano. El hombre cuya mente está más libre de cuidados es el que no conoce su destino por anticipado.
Michael Crichton
Roncar es tomar ruidosamente sopa de sueño.
Ramón Gómez de la Serna
Nuestro negocio es el inmobiliario, no son los restaurantes.
Ray Kroc