La instrucción, en el colegio; la educación, en casa.
Miguel Delibes
La mente intuitiva es un regalo sagrado y la mente racional es un fiel sirviente. Hemos creado una sociedad que rinde honores al sirviente y ha olvidado al regalo.
Albert Einstein
Cuidado, no sea que los velos de la gloria os impidan beber de las aguas cristalinas de esta Fuente viva. Tomad, en este amanecer, el cáliz de salvación en el nombre de Quien hace despuntar el Día, y bebed a plenitud en alabanza de Quien es el Todoglorioso, el Incomparable.
Baha'ullah
Trato de aprender del pasado, pero pienso en el futuro, centrándome exclusivamente en el presente. Ahí es donde está la diversión.
Donald Trump
Qué maravilloso es poder ir más allá del deseo y del miedo en las relaciones. El amor no desea ni teme nada.
Eckhart Tolle
Éste es el siglo de las mujeres y una de las mejores cosas que ha hecho el presidente es nombrar a tantas mujeres en este Gobierno.
Esperanza Aguirre
Volar, volar, volar, como es Alberto volar al más allá... Tira, la soga de tu cuello tira, la soga de mi cuello tira y esto es verdad; y eran los tiempos de la primavera, dejaste tu sonrisa en ella y esto es verdad y la vida como viene va, no hay merienda si no hay capitán.
Fito Páez
Nunca les dejaré hacerte daño, lo prometo.
Gerard Way
Con este saco parezco Rod Stewart.
Héctor Veira
Las voces de la brisa dirán tu nombre como un rumor. Y en el jardín del alma renacerá una flor, y temblarán las manos al presentir tu amor.
Homero Manzi
El idioma es un instrumento de desarrollo y un arma de lucha.
Iósif Stalin
Nuestros antepasados han pasado la edad de hierro; el oro está delante de nosotros.
Jacques-Henri Bernardin de Saint-Pierre
Sólo se reconoce el error cuando todo el mundo lo comparte.
Jean Giraudoux
Es legal porque es mi voluntad.
Luis XVI
La mayor parte de mis problemas me parecían complicados entonces -siguió confesando el Tío-. Pero las soluciones una vez encontradas, resultaban bastante sencillas.
Spencer Johnson
La gente común tiene una naturaleza constante: hila y se viste, ara y se alimenta... en lo que cabría llamar su "libertad natural". En su libertad natural, esta gente nació y murió a su suerte, sin sufrir restricciones ni limitaciones; nunca fue levantisca ni rebelde. Si a los gobernantes les diera por establecer leyes y ritos para gobernar a esta gente, no sería muy diferente de pretender alargar las cortas patas de los patos o recortar las largas zancas de una garza, o de poner ronzal a un caballo.
Zhuangzi