Como quiera que los buenos ejemplos muy pocas veces me enseñan algo, me sirvo de los malos ejemplos, cuya lección es ordinaria.
Michel de Montaigne
Durante toda la vida me he dedicado a problemas objetivos y carezco de las aptitudes naturales y de la experiencia necesaria para tratar como es debido con la gente y ejercer funciones oficiales.
Albert Einstein
Yo no soy político. Además, el resto de mis costumbres son todas honradas.
Artemus Ward
Los padres no están interesados en la justicia, están interesados en la paz y la tranquilidad.
Bill Cosby
Nadie puede hipotecar su injusticia como prenda de su fidelidad.
Edmund Burke
¿Si la esperanza se apaga y la Babel se comienza qué antorcha iluminará los caminos en la Tierra?
Federico García Lorca
Nada aprovecha tanto al hombre como decir la verdad; no obstante, la sinceridad suele volverse contra quien la tiene.
Fedro
Yo en todos los libros acostumbro a leer el prefacio, porque a veces suele ser lo mejor de la obra.
Fernán Caballero
No hay mudo que no hable a señas ni sordo sin entender, la fruta esconde al gusano y te lo muestra al morder.
José Larralde
El que jugó, jugará; que la inclinación al juego se aplaca, mas no se apaga.
Juan Ruiz de Alarcón
El pensamiento es un pájaro extraño que se alimenta de sus propios yerros.
Mario Payeras
Tengo una mente para las finanzas y un cuerpo para el pecado.
Melanie Griffith
La conversación del necio es el martirio del sabio; mas como el número es corto, pocos hay martirizados.
Melchor de Palau
¿A qué se dedica? -Soy abogado. -Debería haberlo adivinado. Hoy día todo el mundo es abogado. Si extrapolamos el crecimiento estadístico de la profesión jurídica, en el año 2035 todas los habitantes de Estados Unidos serán abogados, incluidos los recién nacidos. Serán abogados natos. ¿Cómo cree que será vivir en una sociedad así?
Michael Crichton
Otoño en las montañas. Tantas estrellas y tantos lejanos antepasados.
Nozawa Setsuko
No hay más que una historia: La historia del hombre. Todas las historias nacionales no son más que capítulos de la mayor.
Rabindranath Tagore