En medio del llano canta la alondra libre de todo.
Matsuo Basho
Los libros también transmiten representaciones intensas y atractivas de la realidad, por supuesto, pero el lector participa de manera activa en la evocación de la realidad que el autor del libro intenta plasmar.
Al Gore
Basta frecuentemente una frase corta para derribar un poder.
Claude Lévi-Strauss
La multitud no disimula, ni perdona, ni compadece.
Diego de Saavedra Fajardo
La naturaleza no necesita defensas, sino más defensores.
Edward Abbey
La ocasión no sólo hace al ladrón sino también a los hombres grandes.
Georg Christoph Lichtenberg
Dios ha creado las noches que se arman de sueños y las formas del espejo para que el hombre sienta que es reflejo y vanidad.
Jorge Luis Borges
No es necesario demostrar nuestro patriotismo con guerra, porque eso no es patriotismo, patriotismo es trabajas por el progreso del país.
José Ingenieros
Nunca debemos sentirnos satisfechos con nuestro éxitos. Debemos refrenar la autosatisfacción y criticar constantemente nuestros defectos al igual que nos lavamos la cara y barremos el suelo diariamente para quitar el polvo y mantenerlos limpios.
Mao Zedong
El nacionalismo es siempre fuente de crispación, de confrontación y de violencia, y eso no excluye al nacionalismo que juega a la democracia al mismo tiempo que a la exclusión. Es, sigue siendo, el gran desafío.
Mario Vargas Llosa
Todo tiene sentido, no obstante, cuando entendemos que el término democracia significa el dominio de la economía y de la vida social y política por parte de los elementos nacionales que son adecuadamente sensibles a las necesidades de las empresas...
Noam Chomsky
El deber es lo que esperamos que hagan los demás, no lo que hacemos nosotros mismos.
Oscar Wilde
El placer puro no existe: siempre va acompañado de alguna inquietud.
Ovidio
Sólo el tiempo muestra al hombre justo, mientras que podrías conocer al perverso en un solo día.
Sófocles
Nada hay más terrible que la soledad entre la gente.
Stefan Zweig
Es curiosa la amabilidad de la gente cuando estás muerto.
William M. Holden