Si alguna vez, sin embargo, sois descubiertas hasta el punto de no poder negar vuestra conducta adúltera, jurad que sentís remordimientos y redoblar las atenciones y los mimos a vuestro marido.
Marqués de Sade
La revolución es buena para los historiadores. Sirven todos los partidos, todas las necedades tienen valor, todas las ideas alcanzan un lugar.
Alfonso XIII de España
Hay personas que de sus riquezas no tienen más que el miedo a perderlas.
Antoine de Rivarol
Si usted habla su mente y si es verdad lo que dices, entonces creo que la integridad de lo que estás diciendo lleva a través.
Bill Cosby
los trabajos rutinarios y poco interesantes requieren un jefe; los no rutinarios y más interesantes dependen de la autogestión.
Daniel H. Pink
Iré a Inglaterra o a Italia, seguro. En España, no, porque el único club que hay del nivel del Barça es el Madrid y al Madrid nunca iría.
Deco
Nos consolamos frecuentemente pos debilidad de aquellos males de los que no pueden consolarnos los argumentos de la razón.
François de La Rochefoucauld
Me voy de Polonia a morir rodeado de extraños.
Frédéric Chopin
Poseo entre mis noches no sé qué incertidumbre... Y ese miedo infernal a las ausencias.
Jenniley Bonilla
El estilo es todo lo que el hombre usa para expresarse.
Johannes Mario Simmel
Pienso que entre España y América hay una relación de padres a hijos. Nosotros seguimos unidos a la madre, es innegable. Siempre hay una relación de vejez y de respeto para quienes fueron nuestros mayores, directa o indirectamente.
Jorge Cafrune
El que mata a su semejante, necesario es que muera; por lo cual los Reyes antiguos, progenitores nuestros, instituyeron que cualquiera homiciano fuese castigado con muerte violenta, y Nos los confirmamos de nuevo.
Pachacútec
No murió temprano el que no había de vivir más de lo que vivió.
Séneca
Ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar ahí
Steve Jobs
El cuerpo humano no es más que apariencia, y esconde nuestra realidad. La realidad es el alma.
Victor Hugo
Si crees que no puedo superar la fuerza de mi sexo, es que estas equivocado.
William Shakespeare