Hay que empezar a apoderarse de las calles. De las esquinas. Del cielo. De los cafés. Del sol, y lo que es más importante, de la sombra.
Mario Benedetti
Recuerdo la primera vez que le vi -Ryan Giggs-. Tenía 13 años y se deslizaba sobre el campo como un cocker spaniel persiguiendo un trozo de papel de plata arrastrado por el viento.
Alex Ferguson
El hombre que se ha dedicado a una especialidad encadena a ella todas sus ideas.
Allan Kardec
La sabiduría no está en los hombres canos, sino en los libros viejos.
Antonio de Guevara
Al final a uno lo derrotan siempre. Creo que la derrota es algo inherente a la condición humana, al hecho de vivir y de pelear. Por mucho que venzas, siempre al final hay alguien que te derrota, siempre hay un Rocroi, por mucho que triunfes siempre hay un iceberg esperando al Titanic.
Arturo Pérez-Reverte
Si amas la vida, economiza el tiempo, porque de tiempo se compone la vida.
Benjamin Franklin
Conquisten sus miedos, y conquistarán el mundo.
Colin Farrell
No hay infierno mas duro que los recuerdos.
Eyedea
Creo que la creatividad es espiritual.
F. Murray Abraham
Después de verlo ganar en Valencia puedo decir que es el piloto con más talento que he visto con mis ojos en una pista.
Fernando Alonso
La grandeza no se enseña ni se adquiere: es la expresión del espíritu de un hombre hecho por Dios.
John Ruskin
Ya sea el objeto de tu fe verdadero o falso, obtendrás igualmente los mismos resultados.
Joseph Murphy
Para la Reina sólo existía un modo de resolver los problemas, fueran grandes o pequeños. ¡Que le corten la cabeza!
Lewis Carroll
La serenidad es el gran y verdadero antídoto contra la angustia y el temor, y hoy, la habitación del hombre debe propiciarla. En mis proyectos y en mis obras no ha sido otro mi constante afán, pero hay que cuidar que no la ahuyente una indiscriminada paleta de colores. Al arquitecto le toca anunciar en su obra el evangelio de la serenidad.
Luis Barragán
No estoy en contra de la cirugía plástica, sólo estoy en contra de hablar de ella.
Madonna
La oración es simple, tan simple como un niño que le dice lo que quiere a sus padres.
Oswald Chambers