Construir y destruir son las funciones sedientas de la existencia.
Mariela Cordero García
Los de mentalidad reducida se parecen a las botellas: cuando menos tienen, más bulla hacen.
Alexander Pope
El Planeta está al servicio del hombre, no el hombre al servicio del Planeta.
Ana Botella
Lo que tiene éxito no siempre es lo valioso, sino todo lo contrario. Y en consecuencia, lo que tiene éxito no es lo bueno, ni lo que fracasa lo malo.
Carlos Fuentes
Alonso es el más rápido de los pilotos actuales.
Fernando Alonso
En Cartagena te vi muy realista diciéndole Majestad a Juan Carlos de Borbón Seguile diciendo en adelante Majestad a la impunidad porque ella es la reina de Colombia.
Fernando Vallejo
Para conquistar la verdad hay que sacrificar casi todo lo que es grato a nuestro corazón. El servicio de la verdad es el más duro de todos los servicios.
Friedrich Nietzsche
Levanta hacia mí tus ojos, tus ojos lentos, y ciérralos poco a poco conmigo dentro.
Gerardo Diego
En el pasado la gente nacía o no en la realeza. Hoy en día la realeza viene de lo que haces.
Gianni Versace
Mi mentalidad me obliga a decir que queremos ser campeones del mundo. Si realmente nos la creemos vamos a ser campeones, no sólo del mundo, sino de todos los torneos.
Hugo Sánchez
Para que podamos mirar y tocar sin pudor las flores, sí, todas las flores y seamos iguales a nosotros mismos en la hermandad delicada, para que las cosas no sean mercancías, y se abra como una flor toda la nobleza del hombre: iremos todos hasta nuestro extremo límite, nos perderemos en la hora del don con la sonrisa anónima y segura de una simiente en la noche de la tierra.
Juan L. Ortiz
Es más sabio el amor cuando amanece, cuando ya empieza a oírse la mañana, por el camino largo, desierto de tu piel...
Luís García Montero
Lo único que sabemos del futuro es que será diferente.
Peter F. Drucker
Vivir para ser libres, o morir para dejar de ser esclavos.
Práxedis G. Guerrero
Un hombre tiene la edad de la mujer a la que ama.
Proverbio Chino
Su cerebro se encontraba en perfecto estado. Seguro que el mundo tenía la culpa de que no fuera capaz de sentir.
Virginia Woolf