Si es difícil vivir, es aún mucho más penoso explicar nuestra vida.
Marguerite Yourcenar
Nunca leo, veo las imágenes.
Andy Warhol
Los Episcopales no le exigen mucho a sus creyentes en materia de creencias religiosas. Ellos tienen mujeres sacerdotisas, sacerdotes homosexuales, obispos homosexuales, matrimonios homosexuales - muy parecido a lo que ves en el Consejo Editorial del New York Times... Si, ellos reconocen los Diez Mandamientos pero se apresuran a añadir que no hay que tomarlos literalmente.
Ann Coulter
Tus ojos son ojos vivos que en quien los mira se clavan, y descienden silenciosos hasta la hondura del alma.
Aurelio Espinosa Pólit
Sé que este es un momento triste, pero creo que Dixie Dean estaría impresionado de saber que puede atraer más gente ahora que el Everton en una tarde de sábado.
Bill Shankly
Luchamos contra la miseria pero al mismo tiempo luchamos contra la alienación.
Che Guevara
Una salud demasiado espléndida es inquietante, pues su vecina, la enfermedad, está pronto siempre a abatirla.
Giovanni Papini
Un hombre que está con Dios, está siempre en mayoría.
John Knox
El deber ha de cumplirse sencilla y naturalmente.
José Martí
Sé digno del olor del pan. Sabe estar con las flores de las cunetas, pues el horno de tu madre aún arde.
Mahmud Darwish
Los espectadores ven hoy un buen saque, a veces una buena devolución y eso es todo.
Marcelo Ríos
Aprendí que la valentía no es la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre el miedo. El hombre valiente no es el que no siente miedo, sino aquel que conquista ese miedo.
Nelson Mandela
Lo importante es el matrimonio.
Nelson Rodrigues
Cada persona, en su existencia, puede tener dos actitudes: construir o plantar. Los constructores un día terminan aquéllo que estaban haciendo y entonces les invade el tedio. Los que plantan a veces sufren con las tempestades y las estaciones, pero el jardín jamás para de crecer.
Paulo Coelho
Alguien dijo que cuanto más suave es la caricia, más penetra. Yo digo que cuanto más lento el movimiento, más profundamente llega.
René Lavand
La fortuna teme a los valientes y avasalla a los cobardes.
Séneca