La filosofía epicúrea, ese lecho estrecho pero limpio.
Marguerite Yourcenar
El mundo deja allí su baba como el mar sobre las rocas y como yo con los reflujos del amor.
Antonin Artaud
Es un principio indiscutible que para saber mandar bien, es preciso saber obedecer.
Aristóteles
El modo más seguro de hacernos agradable la vida a nosotros mismos es hacerla agradable a los demás.
Arturo Graf
Pero, ¿Qué se sabe acerca de lo que se quiere? Se quiere o no se quiere, no hay más alternativa. Si tratamos de reflexionar sobre lo que se quiere, veremos que la mayoría de las veces no interviene la voluntad.
August Strindberg
Debo poner mi vida en peligro y venir hasta Pakistán porque creo que el país está en peligro. La gente está preocupada. Vamos a sacar al país de esta crisis.
Benazir Bhutto
A la verdad se llega no sólo por la razón, sino también por el corazón.
Blaise Pascal
¡Sentirse empujado, y atropellado y obligado a circular, y sentir verdaderamente que parece ser verdad que uno no tiene nada que hacer ahí, ni allá, ni en ninguna parte, y, sin embargo, sentirse perplejo ante la idea de que uno está ahí sin saber por qué, y nadie se ha interesado por mí hasta que me ha convertido en el ser que es uno!
Charles Dickens
Si muero joven, toda la gente dirá que lo veía venir.
Dennis Rodman
La fama es el reconocimiento que hace la gente a lo que uno como artista hace, es la recompensa.
Jery Sandoval
La locura es, simplemente, un uso patológico de la razón.
Jesús G. Maestro
Beso tu beso deteniendo el tiempo a ver si se detiene aquí la vida.
Miguel Cantilo
A los franceses no les gusta alejarse mucho y permanecer mucho tiempo separados de ella.
Napoleón Bonaparte
Cuando el 15 de junio de 1958 fui al estadio Nya Ullevi de Gotemburgo, había 50.000 personas con ganas de ver al pequeño niño negro que llevaba el número 10. Muchos me vieron como una especie de mascota en comparación con el físico enorme de los rusos.
Pelé
Los muchachos deben abstenerse de beber vino, pues es un error añadir fuego al fuego.
Platón
Compartimos un enemigo común, pero ¿nos convierte eso en amigos?
Veronica Roth