Tú tienes poder sobre tu mente - no fuera de los acontecimientos. Darse cuenta de esto, y usted encontrará la fuerza.
Marco Aurelio
El socialismo no surge de nuestra voluntad, está más allá de los partidos mismos, porque son las condiciones económicas de los países las que lo convocan.
Alicia Moreau de Justo
Mi corazón está cantando de alegría esta mañana, un milagro ha ocurrido, la luz de la comprensión ha brillado en la mente de mi alumno.
Anne Sullivan
Son tiempos difíciles para los soñadores.
Audrey Tautou
Las definiciones son las guardianas de la racionalidad, la primera línea de defensa contra el caos de la desintegración mental.
Ayn Rand
Barbarie y arbitrariedad: tales son los atributos, aunque se los disimule con otros nombres, que constituyen, según podemos ver en todas partes, el carácter dominante de la Deidad para las religiones populares.
David Hume
Cualquier comparación entre dictadura y democracia sólo puede partir de quien no da valor la democracia brasileña.
Dilma Rousseff
Lo peor que hacen los malos es obligarnos a dudar de los buenos.
Jacinto Benavente
Alguna gente cree en dios, yo creo en la música. Alguna gente reza, yo enciendo la radio.
Jared Leto
Nuestro lema es: más humanos que los humanos.
Joe Turkel
Cada lector se encuentra a sí mismo. El trabajo del escritor es simplemente una clase de instrumento óptico que permite al lector discernir sobre algo propio que, sin el libro, quizá nunca hubiese advertido.
Marcel Proust
Ser poderoso es como ser una dama. Si tienes que andar diciéndoselo a la gente, es que no lo eres.
Margaret Thatcher
A veces llego demasiado pronto, me adelanto. Y hay gente que se aferra a la vida más de lo esperado.
Markus Zusak
Soledad en invierno. Quisiera hacer una pregunta al Buda.
Masaoka Shiki
No se está realmente con los pobres sino luchando contra la pobreza.
Paul Ricoeur
Es un pensamiento que no conduce a nada, una matemática que no establece nada, un arte que no deja obra, una arquitectura sin materia. Pero ha demostrado, sin embargo, ser más perdurable, a su modo, que los libros o que cualquier otro monumento.
Stefan Zweig