Mañana que ya no puedan.
Manuel Acuña
No está la justicia en las palabras de la ley.
Alfonso de la Torre
No hay discusión más tonta que la que se hace con una persona que entiende del tema.
Anónimo
Todo es milagro. Lo es la simple existencia de las cosas. Un milagro es la planta que crece, aunque no dé flores extrañas, y el arpa y la gruta de las voces, aunque creamos saber por qué suenan. Un milagro es el hijo que se concibe, y nace, y se hace hombre.
Antonio Buero Vallejo
Los hombres de genio en el mundo son aquellos que ven con extraña y maravillosa intensidad una parte de la verdad.
Armando Palacio Valdés
Donde expira un pensamiento hay una idea, en el último suspiro de alegría otra alegría, en la punta de la espada la magia: es allí a donde voy.
Clarice Lispector
Habrá que rehabilitar créditos para reconstruir todo eso y mira, por buscar alguna faceta positiva a la tragedia, a lo mejor se reactiva la industria de la construcción por lo menos ahí a nivel local.
Isabel San Sebastián
Puedo atravesar el infierno de nuevo y sé que ella estará esperándome del otro lado.
Kris Buendia
Cualquier mujer que entienda los problemas de llevar una casa está muy cerca de entender los de llevar un país.
Margaret Thatcher
¡Ay de aquel día en que no haya nada que hacer, en que no haya nada que aclarar!
Mariano José de Larra
No ves que me he pasado la vida soñando.
Miguel de Unamuno
El perdonar es liberación; el perdón es pertenencia de cada ser y hay que liberarlo, no con la mente sino con la expansión de la conciencia, con el sentimiento del espíritu, si realmente deseas perdonar.
Norys Uribe Santana
Cuatro cosas hay que nunca vuelven más: una bala disparada, una palabra hablada, un tiempo pasado y una ocasión desaprovechada.
Proverbio Árabe
Pero todo corazón es un testigo y una segura prueba de que la vida es una escala inadecuada para trazar el mapa de la vida.
Roberto Juarroz
Compré unas pilas el otro día, pero ponía pilas no incluidas, así que tuve que volver a comprarlas.
Steven Wright
En los casos de exterminios masivos de personas la población local no profesa un odio sanguinario contra las mujeres, los ancianos y los niños que van a ser aniquilados. Por ese motivo, la campaña para el exterminio masivo de personas exige una preparación especial. En este caso no basta tan sólo con el instinto de conservación: es necesario incitar en la población el odio y la repugnancia.
Vasili Grossman