Si la gente se ocupara de averiguar qué ha pasado en México con el Nafta, vería que cerca de 10 millones de campesinos indígenas han quedado desprovistos de todo. Están inmigrando a las ciudades en busca de un trabajo que no existe. Un país que era de la cultura del maíz, importa ahora maíz de Estados Unidos altamente subsidiado, a costa de haber destruido su propia producción.