Los hombres no cambian, se desenmascaran.
Madame de Staël
No esperes por el juicio final. Se lleva a cabo cada día.
Albert Camus
Todo el mundo puede tener un buen día. El problema aparece cuando tenemos un mal día. Es entonces cuando nos ponemos a prueba. En un sentido tangible, un mal día, mucho más que un buen día, muestra nuestra verdadera esencia.
Arthur Golden
Las película donde actuo no son muy famosas.
Catherine Keener
El hombre que se entrega de lleno a su menester, si es un genio se convertirá en un hombre prodigioso; si no lo es, la tenaz aplicación al trabajo lo elevará por encima de la medianía.
Denis Diderot
Las mujeres somos así. Nos gusta más el silencio porque en él caben todas las cosas que preferiríamos que ellos sintieran o pensaran.
Elísabet Benavent
La sociedad humana está mal tanto por las fechorías de los malos, como por el silencio cómplice de los buenos.
Facundo Cabral
La instrucción en los grandes Estados será, cuando más, mediocre, por la misma razón que en las grandes cocinas se hace todo medianamente.
Friedrich Nietzsche
Yo no soy, ni pretendo ser masoquista. Me adoro mucho para sufrir, aunque de vez en cuando, sin el afán de querer padecer un mal momento... He soltado alguna lágrima, sobre todo, cuando se ha roto una relación de amor.
Gloria Trevi
¿No cree usted que tenemos para enseñar una enormidad de cosas en las que nosotros mismos no creemos?
Henrik Ibsen
Mi vocación es más en la composición que cualquier otra cosa realmente, la construcción de armonías con la guitarra, orquestar la guitarra como un ejército, un ejército de guitarras.
Jimmy Page
Tenía que aprender que quienes le trataban de forma hostil lo hacían debido a su propia debilidad.
Ken Follett
Tengo la horrible sensación de que pasa el tiempo y no hago nada, y nada acontece, y nada me conmueve hasta la raíz.
Mario Benedetti
He estado en la guerra, y no es fácil de matar. Es sangrienta y sucia y totalmente horrible, y las consecuencias son graves.
Oliver Stone
Una sonrisa es la llave secreta que abre muchos corazones.
Robert Baden-Powell
Los niños son los únicos filósofos valientes. Y los filósofos valientes son como los niños, son verdaderamente infantiles. Pues, como los niños, hay que preguntar siempre.
Yevgueni Zamiatin