Uno es de donde tiene los libros.
Luis Señor
Una papeleta de voto es más fuerte que una bala de fusil.
Abraham Lincoln
Aunque entonces tenía yo solamente quince años y no podía juzgar sobre mi verdadera fuerza, o, por mejor decir, debilidad, me resultaba bien claro que no debía envanecerme demasiado por este éxito, ya que mi adversario -un señor anciano y muy simpático- carecía de toda ambición de lucha y, lo que era peor, de verdadera clase de ajedrecista.
Alexander Alekhine
Las circunstancias caen fuera del dominio del hombre; pero la manera de conducirse en ellas es cosa que está en su mano.
Benjamin Disraeli
Vamos a sacar la producción pictórica y escultórica de los museos -cementerios- y de las manos privadas para hacer de ellas un elemento de máximo servicio público y un bien colectivo, útil para la cultura de las grandes masas populares.
David Alfaro Siqueiros
Puedes hacer todo lo que tu mente quiera.
Eminem
Todo el mundo trata de realizar algo grande, sin darse cuenta de que la vida se compone de cosas pequeñas.
Frank A. Clark
Lo que verdaderamente halaga a un hombre es que se crea que merece la pena halagarle.
George Bernard Shaw
A menudo, cuando intentamos alcanzar un objetivo en particular, en el intento por conseguirlo nos encontramos con otros que derivan de la búsqueda de las primeros.
Leandro Kabakian
Un escritor es desleal cuando no puede ser duro consigo mismo.
Marianne Moore
No hay hombre tan decrépito que, recordando a Matusalén, no crea que le quedan todavía veinte años en el cuerpo.
Michel de Montaigne
La verdad no es un animal favorito, es el mejor amigo del hombre.
Robert Oppenheimer
Hay que subordinar, como escribió Jaurès, las leyes brutales de la competencia a las leyes superiores de la vida.
Ségolène Royal
Por lo tanto, no descansaré en mis esfuerzos hasta destruir a mis enemigos de manera total y definitiva.
Shantideva
¿Cómo puedo pensar en dejar Liverpool después de una noche como ésta?
Steven Gerrard
Aguantar, aguantar, es el mejor camino para terminar con ETA. Mucho mejor que los policías de Rubalcaba. Aguantar la gente, y que vean la cara de la gente que no está de acuerdo. Aguantar la vida de cada uno y seguir siendo lo que hemos sido y que no nos doblegue de ninguna manera a nadie. Ellos verán si toman valium o qué. Yo lo que creo es que hay que aguantar.
Xabier Arzalluz