Las cadenas y los muros del hogar no se ven con claridad, son casi siempre invisibles, aunque no menos reales o insuperables.
Luis Rojas Marcos
Por supuesto no hay una fórmula para el éxito excepto, tal vez, aceptar incondicionalmente la vida y todo lo que trae consigo.
Arthur Rubinstein
Nuestro ejército, por la magnitud de su lucha, constituye una autoridad moral continental.
Augusto César Sandino
El ánfora guarda siempre el aroma del primer vino que guardó
Horacio
Por fiel que uno quiera ser, nunca deja de traicionar la singularidad del otro a quien se dirige.
Jacques Derrida
La mentira más antigua de EEUU, Senadora. Los demonios no vienen del infierno. Vienen del cielo.
Jesse Eisenberg
Me duermo en los entierros de mi generación.
Joaquín Sabina
El amor puede hacer ladrar en verso a un perro.
John Fletcher
Cuando la parte intelectual supera a la espiritual no se llega a los puntos más altos.
John Frusciante
Bien podemos juzgar la prosperidad comercial de un país a partir de la cantidad de ácido sulfúrico que consume.
Justus von Liebig
Dios otorga su socorro extraordinario a la fe y a la religión, no a las pasiones.
Michel de Montaigne
Ofertas hay muchas para que abandone el programa. Me han ofrecido, sin exagerar, cheques en blanco.
Patricia Conde
No somos nada si no estamos prestos a ser sensibles con la humanidad.
Pedro Pantoja Santiago
¡Siempre la habilísima estratagema de convertir en cuestiones de beneficencia las cuestiones de derecho!
Rafael Barrett
No quiero decir, naturalmente, ni por un segundo, que tu profesora sea realmente una bruja. Lo único que digo es que podría serlo. Es muy improbable. Pero -y aquí viene el gran pero- no es imposible.
Roald Dahl
El mayor peligro de la creciente amenaza era que los buenos hombres cometían el suicidio intelectual y lo llamaban paz. Los buenos hombres se rendían al miedo y lo llamaban respeto.
Salman Rushdie