Eres la reencarnación de la ruina del país.
Luigi Lo Cascio
He investigado la anatomía de las abejas en las diversas secciones de su cuerpo. Así, en el abdomen, que sigue a su cintura, se halla una vejiga clara. Si la abrimos y la probamos, veremos que contiene un líquido que sabe a miel finísima.
Alberto Magno
Suelen ser atajos los que parecen rodeos.
Antonio de Solís y Ribadeneyra
La telepatía consiste en hablar el uno con el otro desde la distancia y sin decir nada, sin entenderse y sin saberlo.
Boris Makaresko
Tratando a todos amablemente por igual, sin importar su contribución, lo único que lograrás es asegurarte que la ira de la gente más productiva y creativa de la organización vaya creciendo.
Colin Powell
- ¿Quién eres? - El creador de un programa de TV que da esperanza y dicha a millones de personas. - ¿Y quién soy yo? - Tú eres la estrella. - ¿Nada de esto fue real? - Tú eras real. Por eso era tan bueno verte.
Ed Harris
Sin duda el sector seguirá creciendo. El problema es que estas ansias de impulsar su crecimiento creará también la tentación de controlar. Lo hemos intentado con las mujeres, hasta que vimos que no eran de nuestra propiedad. Luego a los niños y los animales... espero que no nos pase lo mismo con Internet.
Eduardo Punset
La ancianidad... me da descaro y me torna invulnerable.
Fernando Sánchez Dragó
Cuanto más se ama a un amante, más cerca se está de odiarle.
François de La Rochefoucauld
La envidia es la impotencia irritada por el mérito.
Ignacio Manuel Altamirano
Tuve que desalojar de mi cama, blasfemando, un pavoroso diccionario de industria en ¡treinta y siete volúmenes! Sentí en aquel momento el supremo hastío del libro.
José María Eça de Queirós
Quien no es feliz con poco no lo será con mucho.
Lao-Tse
La moda, nacida para uniformar, consigue que cada cual de quienes la siguen crea que así se diferencia del resto.
Lola Gavarrón
Tzadikim, aquellas personas que han alcanzado el grado más elevado de espiritualidad y de percepción de Dios.
Najman de Breslev
1ª regla del traficante de armas: que nunca te alcance tu propia mercancía.
Nicolas Cage
Las ideas simples se encuentran sólo en las mentes complejas.
Remy de Gourmont