Pasan los años, y cómo cambia, lo que yo siento, lo que ayer era amor, se va volviendo otro sentimiento. Porque años atrás, tomar tu mano, robarte un beso, sin forzar un momento, formaban parte de una verdad.
Luca Prodan
Moriré por todo. Cuando muera, todo habrá sido un sueño.
Alejandro Lanús
Errar en los consejos que se dan a los príncipes, es errar contra toda la especie.
Antonio Pérez
Mis ejércitos serán los árboles y animales de los bosques y las aves del cielo.
Carlomagno
Intenté ahogar mis dolores, pero ellos aprendieron a nadar.
Frida Kahlo
El hombre arriesga su propia vida cada vez que elige, ¡y eso lo hace libre!
Héctor Alterio
Emil podría estar satisfecho de sí mismo pero, como siempre, no lo está. Todo eso le ha recordado que debe correr más rápido, organizar mejor sus fuerzas, reservar la energía para el final y, sobre todo, estudiar con atención la táctica de sus adversarios para mejorar la suya.
Jean Echenoz
Y si caigo, ¿qué es la vida? Por perdida ya la di, cuando el yugo del esclavo, como un bravo sacudí.
José de Espronceda
Sólo hay dos cosas que podemos perder: el tiempo y la vida; la segunda es inevitable, la primera imperdonable.
Jose Maria Franco Cabrera
Has visto muchas cosas y no temes la muerte, pero algunas veces la deseas, ¿no es cierto? Eso le pasa a los hombres que han visto lo que hemos visto. Como las flores, vamos muriendo, reconocer la vida de cada sorbo de aire, de cada taza de té, de cada muerte. Ese es el camino del guerrero.
Ken Watanabe
Absurdo sería pedir al cálculo lo que puede dar la abnegación.
Leandro Fernández de Moratín
El amor es el poder más duradero del mundo. Esta fuerza creativa, tan bien ejemplificada en la vida de nuestro Cristo, es el instrumento más potente disponible en la búsqueda de la humanidad por la paz y la seguridad.
Martin Luther King
Antes de tragarla el agua de la vertiente hizo crujir mis dientes.
Matsuo Basho
La curiosidad es, en las almas grandes y nobles, la primera pasión y la última.
Samuel Johnson
Amigo, oculta tu vida y propaga tu espíritu.
Victor Hugo
Fue preciso sucumbir a las supersticiones que, más que nosotros, son quienes gobiernan a las naciones.
Voltaire