El que no deja nada en manos del azar hará pocas cosas mal, pero hará muy pocas cosas.
Lord Halifax
Para quien se siente solidario con el destino de este mundo, el choque de las civilizaciones le resulta angustioso.
Albert Camus
Ocurre con la gente de mente pequeña lo mismo que con las botellas de cuello estrecho. Cuanto menos contiene, más ruido hacen al vaciarlas.
Alexander Pope
Nunca traicionaré a Felipe González.
Alfonso Guerra
En cuanto a escribir otro libro sobre geometría en la Edad Media. (para reemplazar al de Euclides, antes se les hubiera ocurrido componer otro Nuevo Testamento)
Augustus De Morgan
La religión de Cristo, es una religión de desesperación, porque desespera de la vida y sólo tiene esperanza en la eternidad.
Charles Péguy
Cuando era pequeña me decían: El trabajo lleva en sí mismo su recompensa. Y yo esperaba, tras el esfuerzo, una recompensa misteriosa, abrumadora, una especie de gracia. Todavía la espero.
Colette
Un verdadero campeón puede adaptarse a cualquier cosa.
Floyd Mayweather
Renunciar a mi pasión es como desgarrar con mis uñas una parte viva de mi corazón.
Gabriele D'Annunzio
Muchos animales son cristianos para compensar la cantidad de cristianos que son animales.
Honoré de Balzac
La vida es muy mala novelista, si uno mete en una novela las cosas que suceden en la vida, que está llena de azares, no hay quien se la crea. La novela es una representación de la vida que no admite todo lo que la vida tiene.
Javier Marías
Me gusta mucho parecer un libro de historia. Puedo parecer de los 40s, puedo ser una chica-hippie de los 70s o aveces puedo parecer la chica hip-hop de los 80s.
Katy Perry
La sociedad no quiere que nadie se destaque. Es el único pecado que no perdona. ¡Desdichado del que es diferente de los demás!
Margaret Mitchell
En la guerra se mata a los pobres. En la paz, los pobres se mueren.
Mia Couto
Cada cosa lleva en sí misma su propia medida.
Mihai Eminescu
Que la gente vulgar exprese sus ideas con claridad está lejos de ser cierto, y cuando lo hace no se debe a su facilidad de expresión, sino a la superficialidad de sus ideas.
Samuel Johnson